Durante la última reunión de Ministros de Agricultura de la Unión Europea, a petición de la delegación belga, los ministros examinaron el impacto en el mercado interior de las normas nacionales que establecen el etiquetado obligatorio del país de origen de los alimentos y, en particular, de la leche y los productos alimenticios que contienen leche o carne. La Delegación belga aprovechó la oportunidad para invitar a la Comisión a evaluar el impacto de las diferentes normas nacionales en el mercado interior después de un año de la aplicación del primer decreto nacional.
En el debate que siguió, algunos ministros advirtieron que el etiquetado de origen obligatorio, a su juicio, no sólo sería costoso y generaría gastos sino que podría ser también perjudicial para el mercado interior y la libre circulación de mercancías. Varias delegaciones apoyaron la solicitud belga de evaluar el impacto sobre las normas nacionales que establecen el etiquetado obligatorio del país de origen de los alimentos. Otros hicieron hincapié en la transparencia, en el derecho del consumidor a estar correctamente informado y en la creciente demanda de la sociedad de conocer el origen de los alimentos, con el fin de apoyar la idea de un etiquetado obligatorio de origen en toda la UE.
Lunes, 17 de julio de 2017/ Consilium/ Unión Europea.
http://www.consilium.europa.eu