Los primeros resultados del control de resistencias realizado por el Instituto Federal de Evaluación de Riesgos (BfR) de Alemania observaron que el gen transferible mcr-1, detectado por primera vez en China y que causa resistencia a la colistina, se encuentra también muy extendido en las bacterias intestinales de animales de granja en Alemania.
Esta resistencia a la colistina se ha detectado con mayor frecuencia en Escherichia coli de aves de corral de engorde. Si bien inicialmente se supuso que la resistencia a la colistina no podía ser transferida entre bacterias, se ha visto que los genes de resistencia transferibles pueden transmitirse a partir de bacterias intestinales inofensivas, conocidas como bacterias comensales, a patógenos, haciendo que estos sean más difíciles de tratar.
El BfR ha analizado aislados bacterianos de investigaciones realizadas entre 2012 y 2015 y según los resultados del estudio, la proporción de bacterias resistentes a colistina aísladas en animales de granja de Alemania no ha aumentado en los últimos años. Los resultados muestran que esta resistencia antimicrobiana transferible existe desde hace años en Alemania, pero sólo se ha detectado recientemente. El siguiente paso es investigar en qué medida esta resistencia antimicrobiana transferible juega un papel en el tratamiento de enfermedades infecciosas en los seres humanos.
Jueves, 7 de enero de 2016/ BFR/ Alemania.
http://www.bfr.bund.de