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La Humane Slaughter Association y el Departamento de Medio Ambiente, Alimentación y Asuntos Rurales (Defra) han unido esfuerzos y destinarán 400.000 libras esterlinas a fondos de investigación que permita desarrollar una manera más humana de aturdir a los cerdos durante el sacrificio comercial.
El aturdimiento de los cerdos por exposición directa a altas concentraciones de dióxido de carbono (CO2) es actualmente una práctica común en el sacrificio comercial de cerdos. El uso de CO2 a altas concentraciones está permitido por la UE y las regulaciones nacionales y este método se utiliza en el Reino Unido, así como en otros estados miembros de la UE.
Sin embargo, la investigación ha demostrado que los cerdos encuentran la exposición directa a altas concentraciones de CO2 aversiva. En 2003, el informe del Consejo de Bienestar de los Animales de Granja (FAWC) sobre el bienestar de los animales recomendó que se eliminara este método. Al año siguiente, un informe de la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) confirmó la eficacia del método, pero señaló que conlleva dificultades respiratorias en los cerdos.
La HSA y Defra están comprometidas en mejorar el bienestar de los animales durante el sacrificio y la financiación tiene como objetivo desarrollar y/o validar un método más humano que podría reemplazar el aturdimiento de cerdos con altas concentraciones de CO2. El objetivo del proyecto es garantizar que cualquier método que se proponga no sólo sea más humano, sino también viable desde el punto de vista práctico y económico, de modo que pueda ser ampliamente adoptado por la industria porcina.
Miércoles, 12 de julio de 2017/ HSA/ Reino Unido.
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