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Un estudio reciente realizado por la Universidad de Wageningen indica que la demanda de fuentes de proteínas de origen europeo es cada vez mayor, pero que ninguna de las actuales fuentes de proteínas disponibles en Europa tiene una relación calidad - precio competitivo con la harina de soja procedente de América del Sur.
Según el estudio se hace necesario aumentar el rendimiento por hectárea de algunas fuentes de proteínas, como la soja, semillas oleaginosas, leguminosas y alfalfa así como nuevas o mejores técnicas de extracción para poder utilizar otras proteínas como ingredientes para piensos, como la proteína de guisante, proteínas a partir de hierba, algas y lentejas de agua. Por otro lado, existe una falta de conocimientos sobre el valor nutritivo de otras potenciales fuentes de proteína, como la quinua, extracto de algas o insectos para su uso en dietas para cerdos y aves de corral.
Actualmente, la harina de soja importada es una de las fuentes de proteínas más importantes en las dietas de cerdos y aves de corral. Es una fuente de proteína de alta calidad con una cantidad razonable de energía y un precio relativamente bajo. En la categoría de las semillas oleaginosas, la harina de soja cultivada en Europa parece ser la alternativa más prometedora. En relación con las leguminosas, el guisante es el representante más prometedor. A largo plazo es posible que las proteínas procedentes de plantas acuáticas e insectos puedan contribuir en la reducción de las importaciones de soja.
La cantidad de tierra cultivable disponible potencialmente disponible en Europa para el cultivo de proteaginosas se estima en 2,4 millones de hectáreas. Un aumento reduciría la superficie disponible para cereales y plantas tuberosas como las patatas y la remolacha azucarera.
Martes, 11 de junio de 2013/ Wageningen UR/ Holanda.
http://www.wageningenur.nl/
