Se utilizaron 20 cerdas ibéricas de la estirpe Silvela. Sus camadas se asignaron, aleatoriamente, a uno de los dos tratamientos experimentales: (C) Control, con acceso permanente a la madre y (LI) Lactancia Intermitente, a este grupo se le impidió el acceso a la madre seis horas los días 29 y 30, ocho horas los días 31 y 32 y diez horas los 33 y 34. El destete se realizó el día 35.
Durante el periodo de restricción se observó en el grupo LI una tendencia hacia un mayor consumo de alimento sólido, que sólo fue significativa en la segunda semana tras el destete aunque, posteriormente, ambos grupos mostraron ingestas similares hasta el final del ensayo. Se han descrito resultados similares en lechones de genotipos similares.
Gráfica 1. Evolución de la ingesta (g/día) de lechones ibéricos sometidos o no a lactancia intermitente.
Por lo que respecta al crecimiento, tampoco se observaron diferencias en la semana de restricción ni en la primera semana post-destete, pero sí en la segunda semana tras el destete, cuando el grupo LI tuvo una mejor GMD. Sin embargo, en la tercera semana fue el grupo C el que presentó un mayor GMD. A los dos meses de edad no se apreciaron diferencias en el peso vivo entre ambos grupos.
Gráfica 2. Evolución de la ganancia de peso vivo (g/día) de lechones ibéricos sometidos o no a lactancia intermitente.
El tratamiento tampoco afectó a la digestibilidad de nutrientes.
Según los resultados de este ensayo, los efectos positivos derivados de la lactancia intermitente no tienen una repercusión clara sobre el crecimiento y el desarrollo del lechón.
F Gómez, MA Aguinaga, RM Nieto Liñán, JF Aguilera. 2009. Porcino Ibérico: La lactancia intermitente no mejora los parámetros productivos. Albéitar: 131(54-56)