Isabel Garc/ía Tejerina, ministra de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, ha inaugurado esta tarde en Salamanca la Feria del Sector Agropecuario Salamaq’15, en la que tienen un papel muy destacado la investigación y la innovación, con la presencia de científicos de la Universidad de Salamanca y del Instituto de Recursos Naturales y Agrobiología de Salamanca (IRNASA-CSIC), que ponen su conocimiento al servicio de la mejora de la agricultura y la ganadería.
Precisamente, la ministra ha destacado la “apuesta por la innovación y la vocación internacional” como principales distintivos de este evento en relación con otros de similares características, citando expresamente el papel de la universidad y del IRNASA como “centros de reconocidísimo prestigio”. El espacio del que disponen para dar a conocer sus proyectos “acerca el conocimiento y la investigación al campo”, afirmó Isabel García Tejerina en palabras recogidas por DiCYT.
En su discurso de inauguración, la ministra puso de relive la importancia de las razas autóctonas en la conservación de la dehesa y en la producción de alimentos de calidad. Precisamente, este aspecto también fue destacado por la consejera de Agricultura y Ganadería de la Junta de Castilla y León y para reforzarlo anunció “un mapa de investigación en el que se apostará específicamente por la innovación genética y la calidad diferenciada del ganado de la comunidad”.
El objetivo es que esta investigación genética permita “mejorar nuestras ya fantásticas razas”, algo que repercutirá en la producción y en la exportación para que los ganaderos tengan mayores beneficios.
Precisamente, uno de los proyectos que la Universidad de Salamanca que se presentan en esta feria y que comienzan a ponerse en marcha tras haber sido premiados por parte de la Diputación de Salamanca en la “I Convocatoria de Proyectos de Investigación Orientados a Ofrecer Soluciones Tecnológicas al Sector Primario” es el destinado a la mejora de la raza morucha a través de estudios citogenéticos.
La raza morucha es una raza bovina que se halla principalmente en la provincia de Salamanca y este proyecto de investigación, dirigido por Jesús María Hernández Rivas, investigador del Departamento de Medicina de la Universidad de Salamanca, busca establecer un plan de calidad para asegurar la ausencia de alteraciones cromosómicas en este ganado. Asimismo, creará un banco de ADN para llevar a cabo un estudio piloto sobre marcadores genéticos para la selección genómica de la raza morucha.
De los centros de investigación al campo:
Además de esta iniciativa, se han presentado en Salamaq’15 otras siete premiadas en esta convocatoria y los resultados de las dos elegidas el año pasado en el “I Premio Diputación de Salamanca a la Transferencia de Conocimiento Universidad-Empresa en el Ámbito Agropecuario”. El primer premio lo obtuvo el investigador José Martínez, que también ha explicado hoy su trabajo. “Es un proyecto que muestra cómo mediante el control de la cantidad de agua que hay en el suelo es posible hacer una mejor planificación del riego, de tal manera que podemos monitorizar en cada momento el contenido de agua en el suelo y determinar si está en condiciones o no de abastecer las necesidades de los cultivos. El objetivo es llevar el trabajo de los centros de investigación al campo, ya existe la tecnología y no tiene una excesiva complicación, con lo que se consigue que el agricultor salga beneficiado inmediatamente”, ha asegurado.
Remedios Morales obtuvo el segundo premio en esa convocatoria de 2014 con un proyecto para poner en marcha una planta piloto para la obtención de extractos y de compost de residuos de ganadería. Además, en la convocatoria de este año también ha resultado seleccionado un proyecto suyo, en esta ocasión, para caracterizar nutricionalmente la lenteja de la Armuña.
Biofertilizantes:
En la misma línea de servicio a los agricultores está el proyecto de Raúl Rivas para mejorar la producción de veza, un cultivo forrajero. “Hoy en día se está fomentando una agricultura más sostenible y, en ese sentido, nosotros queremos obtener el máximo rendimiento con la mínima cantidad de abonos químicos”, explica. Para ello, su grupo de investigación diseñará biofertilizantes basados en bacterias cuyo objetivo es mejorar la producción de veza y que a la vez aporten nitrógeno al suelo. Todo ello se realiza en un contexto de rotación de cultivos de veza y trigo, así que será importante que las bacterias seleccionadas sean beneficiosas para ambos.
Otros proyectos se centran en la ganadería, para la optimización de la alimentación en los sistemas de cebo del cerdo ibérico, estudiar mejoras en el rendimiento económico y en la calidad de la carne de vacuno o crear una plataforma de monitorización y seguimiento inteligente de ganado vacuno selecto. También hay un proyecto sobre trufa y otro sobre la enfermedad conocida como "la seca", que afecta a las encinas.
8 de septiembre de 2015 - Dicyt