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El proceso, denominado QDS (Quick-Dry-Slice), se aplica directamente tras la etapa fermentativa y antes de la larga etapa de secado y maduración final. Las lonchas, después de las primeras fases de elaboración, se someten a una fase de acondicionamiento y secado rápido a temperatura y humedad controladas, seguida de una fase de secado y maduración en atmósfera modificada y temperatura controlada lo que permite obtener un producto que, tras ser envasado al vacío o bien con atmósfera controlada, ya está listo para la venta conservando una textura y propiedades homogéneas, microbiológicamente estable y de alta calidad organoléptica.
Jueves, 26 de abril de 2007/ Diari de Girona/ España.
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