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El organismo con vocación sanitaria OVS Porc Bretagne, formado por productores porcinos, veterinarios, laboratorios, fabricantes de piensos y mataderos ha decidido poner en marcha un dispositivo para proteger el estatus sanitario de la región.
La zona tiene un déficit estructural de lechones y el aumento de la importación de lechones puede poner en riesgo el estatus sanitario de las 3.200 explotaciones de la zona si no se toman precauciones.
Si bien la normativa vigente ya protege la cabaña porcina frente a diferentes enfermedades (enfermedad de Aujeszky, peste porcina, fiebre aftosa) no existe para otras enfermedades como el PRRS o la disentería. Ante esta situación la OVS ha decidido elaborar uno certificados sanitarios que deberán ser firmados por el productor porcino, un veterinario y el comerciante que los transporta. Los movimientos deberán ser comunicados a la base de datos BDporc.
Jueves, 22 de marzo de 2012/ La France agricole/ Francia.
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