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El principal motivo para que Asociaciones y colectivos de distintas comunidades autónomas se agrupen, es la preocupación suscitada por la posibilidad de que la dehesa (entendiendo como tal la superficie más o menos arbolada dedicada a ganadería extensiva) se vea excluida de las ayudas en la nueva PAC.
La aplicación de un estricto coeficiente de admisibilidad de pastos (CAP), puede poner en riesgo el complejo ecosistema de la dehesa.
La nueva Política Agraria Común compromete la supervivencia de árboles y arbustos en la superficies de pastoreo.
La postura de las distintas Administraciones de seguir adelante con la idea de utilizar el criterio de árboles y arbustos existentes en las hectáreas declaradas como baremo para la elegibilidad de las mismas, eliminando así el pasto que crece bajo los robles, alcornoques, fresnos, encinas, etc, y que es vital para la alimentación del ganado extensivo, reducirá las hectáreas admisibles y ocasionará daños irreparables en un futuro.
Al contrario de penalizar la hectárea arbolada en el ámbito de la ganadería extensiva lo que debería hacerse es, bonificarla por su extraordinaria contribución al mantenimiento y mejora del medio ambiente.
Desde la Asociación de Ganaderos 19 de Abril se trasladó hace unos días a D. Fernando Miranda Sotillos, Director General de Producciones y Mercados del MAGRAMA, al igual que en SALAMAQ´14 a la Ministra de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, a la Consejera de Agricultura y Ganadería, al Presidente de la Diputación y al Alcalde de la ciudad, la preocupación entorno a este tema.
29 de septiembre de 2014 - Asociación de Ganaderos 19 de Abril
