El pasado 1 de enero ya entró en vigor con un período transitorio de seis meses para los productos afectados (hasta el 30 de junio del 2003), una Directiva por la que la reglamentación de la UE en materia de etiquetado se modificó con el fin de precisar mejor la definición del término «carne» en el etiquetado de los productos a base de carne. Por lo general, los consumidores consideran que ese término se refiere al músculo. La nueva definición les permitirá distinguir con claridad si lo que están consumiendo es músculo, grasa o despojos. La Directiva se aplica a los productos que contienen carne como ingrediente, pero no, en cambio, a la carne que se vende sin más transformación. Entre los productos afectados figuran las salchichas, el paté, las carnes cocinadas, los platos preparados y la carne en conserva.
Jueves, 26 de julio de 2003/Comisión Europea
http://europa.eu.int/rapid/start/cgi/guesten.ksh