Después de un 2024 positivo, con exportaciones récord y precios internos en máximos nominales, las perspectivas para el sector porcino brasileño se mantienen favorables para 2025. Todo apunta a que la demanda mundial y brasileña de carne de cerdo seguirá sólida. Por el lado de la oferta, estimaciones preliminares del Cepea señalan un aumento en la producción del sector. En el ámbito internacional, el sector porcino nacional continuará apostando por el mercado exterior, buscando fortalecer y/o mejorar su posición en el ranking de los principales actores internacionales.
El excelente desempeño de las exportaciones en los últimos años está vinculado a los esfuerzos del sector por aumentar su presencia en el mercado global, incluso en un contexto de reducción gradual (iniciada a mediados de 2022) de las importaciones de China. Así, a pesar de la disminución de los envíos al país asiático, los embarques hacia otros socios comerciales deberían garantizar otro buen año para las exportaciones.
Estudios del Cepea estiman que, en 2025, las exportaciones de carne de cerdo podrían crecer hasta un 6,6 % en comparación con el volumen de 2024, alcanzando 1,22 millones de toneladas. En el mercado interno, la demanda por carne de cerdo se mantendría firme en 2025, especialmente considerando los elevados precios de la carne de vacuno. Según estimaciones del USDA, el consumo per cápita de carne de cerdo en Brasil crecería un 1,8 % en 2025.
De este modo, para satisfacer de forma sostenible las demandas externa e interna de proteína brasileña a lo largo de 2025, los investigadores del Cepea proyectan que la producción de carne de cerdo alcanzará cerca de 5,53 millones de toneladas en ese año, lo que supone un aumento del 2,8 % respecto a las previsiones para 2024.
3 de enero de 2025 /CEPEA /Brasil.
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