El estudio realizado muestra que no hay consenso internacional sobre bienestar animal y las medidas establecidas dentro de la UE difícilmente se pueden comparar con las existentes en terceros países. El informe sugiere que las distorsiones de la competencia tienen una mayor probabilidad de presentarse en las producciones de tipo intensivo, sobretodo en la producción porcina y avícola.
En el informe se han investigado varios caminos para prevenir éstas distorsiones:
- Mecanismos de mercado ya que los consumidores tienen una mayor predisposición a pagar más por productos "éticos".
- Diálogo a nivel internacional por un mayor reconocimiento del bienestar animal, en particular dentro del marco de la OIE y del Consejo Europeo.
- Promoción de los estándares de bienestar animal en las relaciones comerciales bilaterales, extendiéndose en un futuro al comercio multilateral.
- Mejora de los sistemas de etiquetado como respuesta a la demanda de los consumidores que cada vez son más exigentes.
- Consolidación de la posición del bienestar animal en la política agrícola de la UE.
El documento analiza los pros y contras de los puntos descritos anteriormente, en especial en las implicaciones sobre el bienestar animal en la salud animal, la seguridad alimentaria y la preocupación de los consumidores.
Lunes, 18 de noviembre de 2002/Comisión Europea
http://europa.eu.int/rapid/start/cgi/guesten.ksh