El consejero de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente, Luis Planas, ha abogado por una norma de calidad del ibérico “que diferencie de forma clara las diferentes producciones y evite confundir al consumidor que, actualmente, ve como se comercializa bajo el nombre de “ibérico” hasta ocho productos diferentes, sin contar todas las denominaciones de origen y marcas comerciales que contribuyen a incrementar el caos en el etiquetado”. Planas ha hecho estas declaraciones con motivo de la reunión celebrada en la sede del Ministerio de Agricultura Alimentación y Medio Ambiente (Magrama) con la asistencia de los consejeros de las distintas comunidades autónomas, con objeto de intentar unificar criterios sobre la futura modificación de esta norma.
En opinión de Luis Planas, “urge una nueva normativa que contribuya a llamar las cosas por su nombre”, atribuyendo la denominación de “ibérico” sólo a los productos ibéricos puros y “cruzado de ibérico” a los productos que en virtud de la norma actual se califican de “ibéricos”. En esa apuesta por proteger la raza ibérica y poner freno a la pérdida de pureza del ibérico, al admitirse en la actualidad como “ibérico” el cruce del 50%, el consejero discrepa con la propuesta del Ministerio de elevar dicha pureza racial hasta el 75%. Así, Planas considera que con dicha propuesta lo que se hace es rebajar el nivel de exigencia de 100% de pureza del ibérico puro actual.
Asimismo, señala que la propuesta del Ministerio generaliza de nuevo el uso del término “ibérico” y, por consiguiente, no garantiza el control en la comercialización de los diferentes productos. En ese sentido, Luis Planas destaca la importancia de acuñar entre todos una nueva norma que garantice una diferenciación objetiva, clara y, por tanto justa, de las producciones. “De esa manera, apunta, se evita la competencia desleal, y se pone en valor el esfuerzo de aquellos ganaderos que vienen apostando por el sistema de producción extensiva, tradicionalmente vinculado al ecosistema de la dehesa y a productos de reconocida calidad, y cuya forma de alimentación y manejo suponen un elevado diferencial de costes en relación con los sistemas intensivos”.
Por todo ello, Planas puntualiza que la norma de calidad del ibérico “no puede ser una norma de cantidad y generalidades”, sino que uno de sus principales objetivos debe ser aportar valor añadido a aquellas producciones obtenidas bajo un sistema de producción extensiva característico de la dehesa, para asegurar su continuidad y contribuir al mantenimiento de esta zona de alto valor ecológico y a la preservación de sus recursos naturales.
En ese sentido, el consejero expone cómo en los tres últimos años la producción de bellota en España ha caído un 26% frente al 34% de incremento de la producción de cebo y advierte que “no se puede seguir creciendo al amparo de la actual norma del ibérico, cuando la parte del sector que proporciona la imagen (producción extensiva en dehesa) y el nombre (100% ibérico) se halla inmerso en una profunda crisis debida a una gran sobreoferta y a la falta de diferenciación entre sus productos”.
Para Planas el funcionamiento de la norma del ibérico no puede basarse únicamente en su sistema de control, ya que debe ser capaz por sí misma de establecer criterios muy nítidos que eviten la confusión en el etiquetado y las prácticas fraudulentas. La propuesta de modificación de norma del Ibérico de su Consejería también demanda mecanismos de control más seguros y eficaces que proporcionen un verdadero sistema de trazabilidad, para dar confianza tanto al sector como a los consumidores. De esa forma, se contribuye a mejorar la transparencia en la información sobre la calidad y las propiedades de los productos obtenidos del porcino ibérico en extensivo.
Animales certificados bajo la norma de calidad del ibérico
Del total del ganado porcino ibérico que sigue la actual norma de calidad, Andalucía representa el 17% del censo nacional, con 487.721 animales. De ese total, y atendiendo al tipo de alimentación de bellota, Andalucía representa el 45% del censo, con 234.609 animales (junto con Extremadura concentramos el 94% del ibérico criado en dehesa. En cuanto al intensivo, Andalucía concentra tan sólo el 10% del total nacional .
El censo de porcino en norma de calidad en Andalucía se ha reducido un 27% en los últimos años, mientras que a nivel nacional el censo se ha incrementado un 15% debido, fundamentalmente, al incremento del censo de cebo, que en España ha sido del 34,57%, mientras que en Andalucía se ha reducido un 10%. También destaca la reducción que en este período ha experimentado el porcino de dehesa (total bellota), con un 38% menos de censo en Andalucía y un 25% en España.
20 de septiembre de 2012 - Junta de Andalucía/ Consejería de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente