El riesgo de que el virus de la peste porcina africana (PPA) se introduzca en las regiones no afectadas de la UE a través del pienso ha sido analizado en el último consejo de la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) en relación con esta enfermedad (EFSA, 2021).
En esta valoración, hecha a partir de la revisión sistemática de la literatura, se dispuso de datos publicados recientemente para la persistencia viral en cereales, semillas oleaginosas, legumbres, tubérculos, forrajes, hemoderivados e hidrolizados de proteínas porcinos y fibra. El análisis se ha realizado por tres grupos de expertos (EKE en inglés) independientes compuestos por seis a ocho miembros cada uno. El análisis se realizó en tres pasos: evaluar la probabilidad de contaminación de un producto; evaluar la probabilidad de que el producto contaminado tenga suficiente virus viable para infectar a un cerdo (la dosis infecciosa); y evaluar el volumen de comercio o las importaciones de cada producto de un área afectada en la UE o de Eurasia que llegarían a una granja de cerdos pequeña o de gran escala.
El resultado del modelo proporcionó un rango del riesgo de cada producto respecto a la probabilidad de contaminación, al volumen de comercio (de las áreas afectadas en Europa) o de la importación de las zonas afectadas en Europa y de las áreas en Eurasia y respecto al número de granjas porcinas potencialmente infectadas.
Los ingredientes de piensos, en general, presentan bajo riesgo de transmitir la enfermedad. Es de destacar que ciertos productos procesados, como los hemoderivados (plasma sanguíneo secado por atomización) y las proteínas hidrolizadas, son productos con un riesgo muy bajo, incluso por debajo de los ingredientes de origen vegetal, debido principalmente a que la producción de estos productos está muy regulada y que los procesos productivos han demostrado que son eficientes para eliminar el riesgo, además de que se utilizan en una breve ventana de tiempo durante la vida de los animales (generalmente al destete). Este resultado viene a confirmar la opinión de otras agencias internacionales (OIE, ANSES, UE) que han indicado que los hemoderivados son productos seguros para su uso en alimentación animal.
En general, el estricto cumplimiento de los procesos de bioseguridad y almacenamiento (tiempo de almacenamiento, temperatura de tratamiento) son la garantía para una reducción/eliminación de una posible contaminación por este virus.
13 de mayo de 2021 - APC