El sector porcino constituye el sector agroganadero más importante de Castilla y León, pues representa un 17,29% del total de la producción de la rama agraria de nuestra Comunidad Autónoma y 2.363,32 Millones de euros (Fuente: Cuentas Económicas de la Agricultura en Castilla y León 2021). Según datos del MAPA de noviembre de 2023, el censo de porcino de la Comunidad se sitúa en 4,7 Millones de cabezas, siendo la tercera región de España en producción porcina, después de Aragón y Cataluña. Cabe destacar además que la alimentación animal, en concreto la del ganado porcino es un importante sector también en nuestra región, que se eleva a 2,4 millones de toneladas y supone el 13% de la producción nacional para esta especie ganadera.
La presencia de patologías en una granja es un problema que tiene repercusiones tanto en el bienestar animal como en la rentabilidad de la granja, (descenso del crecimiento, mortalidad, gastos veterinarios, limitación de movimientos del ganado a otros destinos, etc.).
Actualmente la normativa vigente indica que el uso de tratamientos antibióticos veterinarios debe de ir precedido de un análisis para determinar posibles resistencias antimicrobianas presentes en los microorganismos causantes de la enfermedad. El uso de antibióticos se ha reducido en gran medida en los últimos años, siendo esenciales las medidas de bioseguridad y de prevención en las granjas para garantizar las condiciones de salud y bienestar de los animales.
Además, el sector porcino viene realizando un gran esfuerzo para la implantación de mejores técnicas disponibles, que favorecen la integración de la actividad ganadera en el entorno, reduciendo el impacto ambiental y la mejora del bienestar de los animales.
En este marco nace el proyecto SANPOR (Control no antibiótico de patologías digestivas y de la microbiota ambiental para la mejora de la sanidad animal y la reducción de emisiones en las fases de transición y cebo de cerdo blanco), cofinanciado con fondos FEADER y coordinado por el Centro de Pruebas de Porcino de ITACyL con la participación de las empresas Lallemand Animal Nutrition y Granjas Baeza-Fraile.
El objetivo principal de este proyecto es, por tanto, evaluar varias soluciones antimicrobianas naturales, individualmente o combinadas (probióticos, prebióticos, productos de mejora del perfil microbiano del ambiente, fibra dietética) que permitan mejorar la sanidad y bienestar animal mejorando la digestibilidad de la proteína y la eficiencia alimentaria, reduciendo por lo tanto las emisiones, reduciendo también el impacto medioambiental, en lechones en la fase post-destete y en cerdos de cebo, con un objetivo principal: reducir la necesidad de tratamientos antibióticos en las fases de transición y cebo, favoreciendo, a la vez, la digestibilidad de los nutrientes de la dieta.
Con ello se pretende además de mejorar los rendimientos productivos en transición y cebo, reducir las intervenciones veterinarias por patologías intestinales, y también disminuir las emisiones de gases, en especial amoniaco, debido a una mejora en la eficiencia de utilización de la proteína del alimento, a través de aditivos añadidos a la dieta del animal y otros que son aplicados directamente en las instalaciones ganaderas, con un efecto directamente en el ambiente.
El objetivo final es la mejora del estado sanitario de los animales, lo que a su vez supondrá la reducción de tratamientos antibióticos, e incrementar los estándares de bienestar y la sostenibilidad económica y medioambiental de las granjas.
2 de abril de 2024 - ITACyL