

- En una primera fase, a partir de 1 de enero de 2012, no castrar quirúrgicamente sin anestesia previa y prolongada de los animales.
- A partir del 1 de enero de 2018 abandonar por completo la práctica de castración quirúrgica de los animales.
En la declaración, primera de su clase a nivel de la Unión Europea con respecto al bienestar animal, las asociaciones firmantes invitan abiertamente a otros operadores del sector porcino Europeo a adherirse a esta iniciativa.