El ibérico, la situación actual del sector y las perspectivas, han centrado las jornadas profesionales que se celebran en el marco de AGROMAQ 2011. El director regional de NANTA, Óscar Gorostiaga, que fue el encargado de abrir las ponencias junto al diputado de Agricultura, Jesús María Ortiz, explicó que la presencia habitual de NANTA en la Feria de Salamanca es porque se trata de un punto de encuentro para buscar conversaciones y debate. Respecto al difícil momento que atraviesa el sector –tanto productor como industrial-, Gorostiaga califica este año de “horribilis”, con un incremento de los costes de producción para los ganaderos de porcino del 42%, “algo que hace mucho daño”, por lo que el margen comercial ha disminuido drásticamente, a lo que se suma la crisis económica general, “que ha demostrado que no todos los españoles consumen ibérico”.
Para el responsable regional de NANTA, el profesional “tiene que preguntarse qué puede hacer para salvar esta situación, porque no podemos estar llorando o pensando que las materias primas podemos dominarlas, los precios se marcan a nivel mundial y hay que adaptarse”. En este sentido apuntó que hay que pedir a los gobiernos ayuda para que las volatilidades de las materias primas no sean altas y a nivel productivo lo que tenemos que hacer “es trabajar, ser más eficientes, disminuir costes y trabajar duramente en las explotaciones, es lo único que se puede hacer y a nivel de venta intentar que también nos apoyen las administraciones para exportar”.
Sin embargo, no consideró que la exportación “sea la panacea” para salvar al ibérico, aunque sí reconoció que es una posibilidad importante de incremento de trabajo. “Tenemos que desarrollar esta línea y no depender tanto del consumo nacional”. Reconoció que hay intrusismo y afirmó que todavía hay que aclarar “muchas cosas de cara al consumidor, ser más transparentes y tratar de definir lo que tenemos y no engañar”.
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