Tras la notificación inmediata de presencia de la peste porcina clásica (PPC) en Japón a inicios de septiembre en cerdos domésticos de una explotación comercial, las autoridades han informado a la OIE de nuevos casos, todos ellos afectando a jabalíes. Según los informes que ha ido publicando la OIE, los casos en jabalíes ascienden a 19.
En relación con el primer foco en doméstico, el 10 de septiembre se terminó de sacrificar a todos los cerdos de la explotación y se eliminaron los cadáveres. El 11 de septiembre se acabó la desinfección de los materiales y herramientas contaminadas así como la explotación. Se identificaron 13 explotaciones donde debía realizarse vigilancia intensiva y se realizaron exámenes clínicos, ELISA y PCR siendo todos los resultados negativos para PPC.
El 13 de septiembre se encontró un jabalí muerto en un radio de 3 a 10 km de la explotación afectada (zona de restricción de los envíos de animales) y el 14 de septiembre se confirmó la PPC. El 12 de septiembre de 2018 se estableció un Equipo reforzado de investigación epidemiológica para el evento de PPC al que se unió, tras la detección de la enfermedad en un jabalí, un experto en fauna salvaje. El Instituto nacional de salud animal (NIAH) publicó el resultado del análisis genético del virus de la PPC en y consideró que era probable que el virus hubiera sido introducido desde el extranjero ya que pertenece al subgenotipo 2.1 5.
Por otro lado, hoy mismo se han levantado las restricciones impuestas a los movimientos en un radio de 3 km de la granja afectada ya que han transcurrido 28 días después de la implementación completa de las medidas de control (sacrificio sanitario, desinfección, etc.) en la granja afectada.
A fecha de hoy se han analizado 130 jabalíes en la prefectura de Gifu y se han encontrado 19 positivos y el resto (111) negativos. En las otras prefecturas, se han analizado 68 jabalíes en 29 prefecturas y todos resultaron negativos.
Octubre de 2018/ OIE.
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