El laboratorio de la Oficina Nacional de Seguridad de la Cadena Alimentaria de Hungría (NEBIH) ha confirmado la presencia del virus de la fiebre aftosa en una granja con 1400 cabezas de ganado vacuno en Kisbajcs, tras detectarse síntomas característicos a principios de marzo. La enfermedad, altamente contagiosa y con graves consecuencias económicas, no se registraba en el país desde hace más de 50 años.
Cabe destacar que la fiebre aftosa no afecta a los seres humanos y no supone un riesgo para la salud pública, aunque puede causar grandes pérdidas económicas en el sector ganadero.

Ante esta situación, el veterinario jefe nacional, Dr. Szabolcs Pásztor, ordenó el cierre inmediato de la granja y el inicio de una investigación epidemiológica para determinar el origen del brote. Además, se implementaron medidas extremadamente estrictas, como la prohibición del transporte de animales sensibles y sus productos, para evitar la propagación del virus.
Actualmente, se están llevando a cabo acciones para erradicar el foco y rastrear su origen. Las autoridades instan a los ganaderos a seguir estrictamente las normas sanitarias e informar sobre cualquier sospecha de la enfermedad a sus veterinarios.
Se trata del segundo foco de la enfermedad en poco tiempo en la UE, ya que el pasado mes de enero, Alemania detectó también un brote de la enfermedad en una granja de traspatio con 14 búfalos de agua en Hoppegarten, Märkisch-Oderland, Brandeburgo. El último brote en Europa, antes de la reaparición, tras 37 años, en Alemania, se registró en Bulgaria en 2011.
7 de marzo de 2025 | NEBIH | Hungría | https://portal.nebih.gov.hu