Los precios mundiales de los alimentos subieron en mayo por quinto mes consecutivo, impulsados por el aumento de los precios del queso y el maíz como consecuencia de las adversas condiciones meteorológicas.
El índice de precios de los alimentos de la FAO -que hace un seguimiento de la variación mensual de los precios internacionales de los productos básicos alimentarios que se comercializan habitualmente-, registró una media de 172,4 puntos en mayo, lo que supone un aumento del 1,2 por ciento con respecto al mes anterior, mientras que sigue estando un 1,9 por ciento por debajo de su nivel de mayo de 2018.
El índice de precios de la carne de la FAO se situó en mayo en un promedio de 170,2 puntos, lo cual representa una subida marginal desde abril; se mantiene así la tendencia de modestos aumentos de precios de mes en mes que se viene observando desde el comienzo del año. En mayo, las cotizaciones de la carne de cerdo siguieron subiendo debido a la fuerte demanda de importaciones, en especial de Asia oriental, que obedece principalmente a una disminución de la producción asociada a la propagación de la peste porcina africana en la región. Los precios de la carne de ovino también se vieron reforzados por la solidez de la demanda de importaciones, a pesar de los volúmenes récord de exportaciones procedentes de Oceanía, mientras que los precios de la carne de aves de corral se mantuvieron estables debido a las condiciones equilibradas del mercado. Por el contrario, las cotizaciones de la carne de bovino disminuyeron respecto de los máximos registrados en abril, como resultado de los abundantes suministros para la exportación en todo el mundo.
Jueves, 6 de junio de 2019/ FAO.
http://www.fao.org