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De acuerdo con el proyecto de Ley presentado, el uso del distintivo será voluntario, quedando vinculado al cumplimiento de determinados criterios más estrictos que las normas legales mínimas vigentes en Alemania.
La etiqueta será de aplicación, en una primera fase, únicamente para el sector porcino, previéndose extender su uso, en una segunda fase, a otras producciones animales.
Para optimizar las oportunidades de comercialización se ha creado una etiqueta que abarca tres niveles:
- la cría animal,
- el transporte y
- el sacrificio.
El Gobierno alemán se compromete en el proyecto de Ley en cuestión a emprender la iniciativa a favor de una etiqueta obligatoria a nivel de toda la UE y a hacer todos los esfuerzos necesarios para lograr que dicho distintivo sea introducido a escala comunitaria. Además, se continuará analizando cómo se podría proceder para lograr regular una etiqueta obligatoria y vinculante a nivel nacional.
El uso del distintivo quedará abierto, así mismo, para los operadores extranjeros, siempre y cuando éstos demuestren haber cumplido las disposiciones legales correspondientes.
La ministra federal de Alimentación y Agricultura, Julia Klöckner, calificó el proyecto aprobado por el Consejo de Ministros como “un gran éxito”. “Significa un paso decisivo hacia más bienestar animal, más orientación y transparencia para los consumidores, así como más seguridad de ingresos para los ganaderos”.
Septiembre de 2019/ BMEL/ Alemania.
https://www.bmel.de
