Artículos sobre parto

En esta tercera y última entrega, Antonio Palomo nos resume las ponencias sobre producción y reproducción, centrándose especialmente en las cerdas.

Secar y calentar a los lechones favorece su supervivencia tan solo en maternidades con temperaturas moderadas o subóptimas (<25ºC).

Inducir el parto puede ser necesario para mejorar la capacidad del personal de la granja de supervisar las parideras, pero hay que ser estratégico, no inducir a menos que la evidencia sugiera que es necesario.

Revisión sistemática para evaluar los efectos de la inducción del parto sobre la tasa de lechones nacidos muertos, el peso al nacer, la mortalidad antes del destete, el peso al destete, la duración del parto y las características del calostro y la leche.

Usando una riñonera podrás tener siempre a mano todo lo necesario para atender los partos.

Si queremos asegurar la cantidad necesaria de calostro por lechón y ayudar a los lechones más pequeños a conseguirlo, hay que trabajar el encalostramiento secuencial.

Identificar las distintas fases del parto nos permite monitorizar el proceso e implementar medidas adecuadas para maximizar el número y la viabilidad de los nacidos vivos.