Fuentes de proteína alternativas en dietas para lechones destetados precozmente

Javier Piquer
17-may-2001 (hace 23 años 7 meses 5 días)

Las recientes restricciones en el uso de proteínas de origen animal en alimentación animal ha llevado a los nutricionistas a considerar la necesidad de utilizar fuentes alternativas de proteína. La sustitución de las harinas de carne tiene un cierto coste, pero se puede conseguir con relativa facilidad. El mayor problema radica en la sutitución de las harinas de pescado y plasma en piensos de primeras edades. En el caso de la harina de plasma, independientemente de su valor nutricional, la dificultad principal radica en encontrar una o varias materias primas alternativas que permitan conseguir consumos similares en el período postdestete así como una buena salud intestinal. En el caso de las harinas de pescado, la sustitución se puede basar más en parámetros puramente nutritivos, teniendo en cuenta que no sólo hay que aportar la proteína y aminoácidos sino también la energía y minerales presentes en las harinas de pescado.

A continuación se resumen algunas de estas alternativas, con un breve resumen de sus posibles ventajas e inconvenientes:

1. Proteína de patata. Presenta la ventaja de tener una alta concentración proteica y un buen aporte de aminoácidos esenciales, especialmente lisina y treonina y ser de alta digestibilidad. Su principal inconveniente es la limitación de inclusión por contener alcaloides que dan un sabor amargo. Cuanto menor es el contenido en estos alcaloides, mayor puede ser la inclusión de la materia prima.

2. Concentrados proteicos de soja. Su utilización se ve limitada por la presencia de factores antinutricionales en la proteína de soja (inhibidores de tripsina, lectinas, etc). Cuanto mayor es su contenido proteico (aislados en lugar de concentrados), menor es la concentración de estos factores antinutricionales y mayor puede ser su inclusión. Algunos concentrados con valores de proteína bruta inferiores al 60% son tratados por un proceso enzimático para eliminar estos factores antinutricionales. El factor limitante será entonces el precio.

3. Proteínas de origen microbiano. Su inclusión o no dependerá de la composición en aminoácidos de las mismas y del precio.

4. Concentrados proteicos de trigo. Tiene un alto contenido en proteína bruta, pero su composición en aminoácidos esenciales es el factor limitante para su inclusión en los piensos de primera edad. Sin embargo, tiene un elevado contenido en glutamina, que es esencial como nutriente para las células epiteliales del intestino delgado. Existen concentrados proteicos hidrolizados y no hidrolizados.

5. Leche y sus derivados. En este momento son de gran interés por su aporte de lactosa y de proteína láctea, ambos de muy buena digestibilidad para el lechón inmediatamente tras el destete.

6. Aminoácidos libres. Su digestibilidad es muy buena, pero es recomendable limitar el máximo de inclusión para evitar que los piensos se acerquen demasiado a dietas semisintéticas, en las que los crecimientos se pueden ver reducidos.

Aunque las alternativas son muy variadas es muy difícil que haya una de elección y parece lo más lógico sustituir la harina de pescado por una mezcla de otras fuentes de proteína y por aminoácidos sintéticos