Uso en porcino de microbios aislados del propio huésped como probióticos

La suplementación con probióticos podría ser una medida de protección para mejorar la diarrea, pero los resultados del uso de los probióticos pueden depender de la especificidad del huésped. Este estudio tuvo como objetivo evaluar la eficacia de un probiótico específico del huésped sobre el crecimiento, la diarrea, la microbiota intestinal y la salud intestinal de los cerdos en fase de crecimiento-engorde. El ensayo (180 d) utilizó 36 lechones destetados a los 28 días de vida que fueron divididos en tres grupos en función del tratamiento dietético (4 réplicas y 3 cerdos/corral) sin uso de antibióticos. Los tratamientos fueron: T0 (dieta base, control), T1 (dieta base + probiótico de origen lácteo, Lactobacillus acidophilus NCDC-15) y T2 (dieta base + probiótico de origen porcino, cepa FT28 de Pediococcus acidilactici). El programa de alimentación fue en 4 fases (de 5-10 kg, 10-20 kg, 20-50 kg y 50-80 kg de peso corporal) y proporcionó 23,2, 21,0, 19,6 y 15,3% de proteína bruta. Los probióticos se administraron como pienso fermentado a razón de 200 g/cerdo/día. El procedimiento fue 1 kg de maíz molido mezclado con 1 litro de agua e inoculado con un cultivo de 24 horas (100 ml de cultivo inoculado). Seis cerdos de cada grupo fueron sacrificados al final de la prueba para determinar la morfología intestinal.

La alimentación diaria de probióticos desde el destete hasta la edad de sacrificio dio lugar a un aumento en la ganancia media diaria (GMD), del consumo medio diario de materia seca (IMD) y el índice de conversión (IC). El recuento fecal de bacterias del ácido láctico (BAL) y bifidobacterias se incrementó, mientras que la población de E. coli y clostridios disminuyó en ambos grupos alimentados con probióticos en comparación con el control. La concentración de ácido láctico en las heces fue más alta para los cerdos alimentados con la dieta T2. De forma diferente, se observó que el nitrógeno amoniacal y el pH eran más bajos en los cerdos T1 y T2 en comparación con el control. Ambas suplementaciones probióticas (origen lácteo y porcino) redujeron las puntuaciones de diarrea después del destete, sin embargo, la cepa FT28 de P. acidilactici fue más efectiva que L. acidophilus NCDC-15. Se observó un aumento de la altura de las vellosidades (V) y de la profundidad de las criptas (C) con una disminución de la relación V:C para ambos suplementos probióticos.

En conclusión, suplementar la dieta con probióticos mejora el crecimiento, el recuento microbiano fecal y la morfología intestinal en los cerdos de engorde. La cepa Pediococcus acidilactici FT28 se mostró más efectiva en comparación con Lactobacillus acidophilus NCDC-15 para controlar la diarrea y mantener el ambiente ácido en el tracto intestinal produciendo más ácido láctico fecal, lo que sugiere la especificidad de los probióticos en función de la especie huésped.

El uso de microbios aislados del huésped como probiótico debería ser una tecnología más apropiada para mantener el estado de salud y el rendimiento de los animales al mejorar el estrés provocado por el destete.