Silva, B. A. N., Tolentino, R. L. S., Eskinazi, S., Jacob, D. V., Raidan, F. S. S., Albuquerque, T. V., Olivera, N. C., Araujo, G. G. A., Silva, K. F. and Alcici, P. F. (2018). Evaluation of feed flavor supplementation on the performance of lactating high-prolific sows in a tropical humid climate. Animal Feed Science and Technology, 236, 141-148. https://doi.org/10.1016/j.anifeedsci.2017.12.005
05-abr-2018 (hace 6 años 7 meses 16 días)Las cerdas reducen el apetito y el rendimiento durante la lactancia para minimizar la producción de calor cuando están bajo estrés por calor. Concentrar la dieta o incluso reducir el contenido de proteína son estrategias comúnmente estudiadas. Por contra, el uso de aromas en el pienso podría ser beneficioso para estimular la ingesta de alimento bajo estrés por calor. En este estudio, un total de 300 cerdas (Landrace x Large White) de diferente paridad fueron alimentadas con piensos con diferentes niveles de aroma durante la lactación y se evaluó su rendimiento productivo y reproductivo en condiciones tropicales. Usando un diseño aleatorizado completo, las cerdas fueron asignadas a 3 tratamientos dietéticos: dieta control (T1) y otras dos dietas con diferentes niveles de inclusión de aromas (T2 = 250 y T3 = 500 g/t) durante la lactación de 24 días y durante el intervalo destete-estro (IDE). Las temperaturas ambiente y las humedades relativas mínimas y máximas (promedio) medidas diariamente fueron de 17,4 °C y 34,7 °C, y 38,0% y 93,8%, respectivamente.
El uso de aroma influyó en la ingesta voluntaria de alimento de las cerdas. Las cerdas alimentadas con el nivel T3 mostraron una mayor ingesta que las T2 y T1 (6,60 vs. 6,02 vs. 5,08 kg/d, respectivamente). El mayor nivel de inclusión de aroma (T3) dio lugar a un consumo de alimento un 9,6% más alto en comparación con el nivel T2. Las cerdas T3 tuvieron un número de lechones destetados mayor en comparación con las cerdas T2 y T1 (13,45 vs. 13,07 vs. 12,95 lechones, respectivamente). La ganancia media diaria de peso de los lechones se vio también afectada por el tratamiento ya que en las camadas procedentes de las cerdas T3 la ganancia diaria fue mayor en comparación con las procedentes de cerdas T2 y T1 (3,37 vs. 2,75 vs. 2,58 kg/d, respectivamente). El peso al destete también fue mayor para los lechones de cerdas T3 en comparación con las cerdas T2 y T1 (7,00 vs. 6,16 vs. 5,86 kg, respectivamente). La producción diaria de leche calculada fue mayor en las cerdas alimentadas con T3 que con T2 y T1 (12,99 vs. 9,55 vs. 8,59 kg/d, respectivamente). No se detectaron diferencias entre tratamientos para el intervalo destete-estro, que fue de 4,3 días de promedio. Los tratamientos influyeron en la frecuencia respiratoria ya que las cerdas T3 tuvieron una frecuencia respiratoria más alta que las T2 y T1 (82,7 vs. 79,6 vs. 65,4 respiraciones/min, respectivamente). De forma similar, las temperaturas rectales para las cerdas T1 mostraron valores más bajos en comparación con las cerdas T2 y T3 (38,8 vs. 39,1 vs. 39,3 °C, respectivamente).
En conclusión, el uso estratégico de aromas en el pienso para estimular el consumo voluntario de las cerdas puede beneficiar la producción de leche y mejorar el rendimiento de las camadas, lo que puede ayudar a reducir los efectos negativos de las condiciones de estrés térmico en cerdas en lactación.