Disminución del aporte de paja en las emisiones de amoniaco y olores en cerdos de engorde alojados en cama de paja

Teniendo en cuenta por un lado que los sistemas de producción porcina que utilizan cama de paja son preferidos por los consumidores, ya que parece que proporcionan mayor bienestar para los animales y reducen la emisión de malos olores, y por otro que el desarrollo de este tipo de producción podría verse limitado por la baja disponibilidad de paja, el presente estudio tuvo como objetivo determinar los efectos de una forma simple de reducir esta problemática, reducir el aporte de paja.

Se determinó el impacto de una reducción del 33% en la paja utilizada para cama en las emisiones de amoniaco, gases de efecto invernadero y malos olores. Para ello dos lotes sucesivos de cerdos de engorde se agruparon en tres salas idénticas que sólo diferían en la frecuencia y cantidad de paja suministrada. En la primera sala (RR), la cantidad total de paja para todo el período se fijó en 90 kg por cerdo. En la segunda y tercera salas (R33 y R33F) la cantidad de paja se redujo en un 33% (60 kg por cerdo). En los tratamientos RR y R33 la paja se añadió cada dos semanas hasta los 65 kg de peso y semanalmente después, mientras que en el R33F la paja se añadió cada semana.

La reducción en la cantidad de paja no conllevó a un empeoramiento del rendimiento y de las características de la canal mientras que si aumentó las emisiones de amoniaco y olores y la suciedad, especialmente para el tratamiento R33. Este aumento de las emisiones de amoniaco y olor parece que fue menos importante en el caso de R33F en comparación con R33. La reposición de paja una vez por semana parece ser una buena manera de limitar los efectos negativos causados ​​por la reducción de la paja utilizada por cerdo.