Previsiones de producción y comercio de carne de cerdo en Japón para 2024

Producción

Se espera que el número de cerdos beneficiados en 2024 alcance los 16,85 millones, ligeramente por encima de 2023 (16,74 millones). Las mayores existencias iniciales, resultado de los retrasos en el beneficio durante el verano extremadamente caluroso de 2023, aportarán gran parte del incremento. La fuerte demanda de carne de cerdo apoyará los precios de las canales e incentivará a los porcicultores a mantener los niveles de producción.

La producción de carne de cerdo en 2023 se mantuvo estable, pero experimentó fuertes oscilaciones durante la segunda mitad del año. Las altas temperaturas del verano redujeron el apetito y los cerdos tardaron más en ganar peso. El consiguiente retraso en el beneficio provocó una leve escasez y los precios de las canales de cerdo se dispararon en agosto y septiembre. A continuación, el clima templado del invierno permitió un rápido aumento de peso y el ritmo de beneficio de cerdos se recuperó rápidamente.

Censo

Los inventarios finales en 2024 se mantendrán estables en términos interanuales, suponiendo que las condiciones climáticas sean benignas y no se produzcan brotes de enfermedades.

La producción porcina en 2024 debería aumentar con el crecimiento previsto de la población de cerdas a partir de 2023.

Consumo

A pesar del efecto moderador de la inflación, se prevé que el consumo de carne de cerdo en Japón en 2024 se mantenga estable con respecto a 2023, impulsado por la fuerte demanda en el comercio minorista y en el sector de la restauración, que sigue beneficiándose del repunte del turismo tras el COVID. La carne de cerdo se ha convertido en una proteína animal básica en la dieta japonesa, especialmente en la cocina casera. Es relativamente inelástica al precio, por lo que se ve menos afectada por la inflación, pero los consumidores prefieren cada vez más los cortes de cerdo más baratos.

Importaciones

Se prevé que las importaciones japonesas de carne de cerdo en 2024 aumenten sólo un 1 % para cubrir el déficit de la oferta nacional. La continua incertidumbre en los tipos de cambio y las cadenas de suministro extranjeras probablemente llevará a los comerciantes a limitar las importaciones a lo necesario para satisfacer la demanda actual. El aumento de los costos de desembarque redujo en un 6 % las importaciones de carne de cerdo de Japón en 2023. La debilidad del yen frente al dólar y el euro fue uno de los factores, pero también las tensiones internacionales en el Mar Rojo aumentaron aún más los costos de importación cuando las rutas marítimas a través de la región dejaron de estar disponibles. Los buques procedentes de Europa con destino a Japón tuvieron que cambiar de ruta para evitar el Mar Rojo, lo que afectó a cerca del 20 % de las importaciones de carne de cerdo, principalmente carne de cerdo congelada y productos derivados. Además, Japón siguió suspendiendo las importaciones de algunos países europeos, como Alemania e Italia, debido a los brotes de peste porcina africana (PPA). Para estabilizar los suministros, los importadores redujeron sus existencias un 7 % respecto a 2022.

Sanidad

Durante el pasado año se notificaron casos de peste porcina clásica (PPC) y diarrea epidémica porcina, pero las repercusiones en la producción fueron limitadas. En 2023, cuatro casos declarados de PPC provocaron el descarte total de 13 400 cerdos. Dos de los casos se produjeron en la prefectura de Saga, en la isla de Kyushu, que cuenta con el 31 % de la cabaña porcina total de Japón. Los gobiernos prefecturales y los operadores porcinos locales han acordado aplicar la vacuna contra la PPC a los cerdos sanos criados en la isla de Kyushu para prevenir nuevos brotes en la mayor zona de producción porcina.