Efecto del sulfato de cobre y el óxido de zinc sobre los rendimientos de los lechones al destete y los niveles de minerales

NW Shelton, MD Tokach, JL Nelssen, RD Goodband, SS Dritz, JM DeRouchey, GM Hill, RG Amachawadi, and TG Nagaraja. 2009. Swine Day, Kansas State University. 88: 65-71.

11-mar-2010 (hace 14 años 8 meses 13 días)
El zinc y el cobre son dos minerales que, en algunos países, se añaden a niveles farmacológicos a las dietas de destete como promotores de crecimiento. Diferentes estudios han mostrado que aumentando los niveles de zinc en la dieta se mejora el crecimiento de los lechones y se reduce la incidencia por diarreas de las 2 a las 4 semanas post-destete. El óxido de zinc (ZnO) es la forma de zinc más utilizada. El cobre añadido en la dieta también ha presentado mejoras en los crecimientos de los lechones al destete, siendo del sulfato de cobre (CuSO4) la fuente de cobre más utilizada en porcino. Históricamente, la combinación de ZnO y CuSO4 a niveles farmacológicos ha presentado mejoras en los rendimientos productivos de los lechones similares a los alcanzados con la suplementación de ZnO solo. El objetivo del presente experimento fue evaluar el efecto de la adición de cobre y zinc en la dieta durante un período más largo que en ensayos anteriores y determinar el impacto de la utilización de diferentes regímenes de minerales utilizando dosis farmacológicas de zinc justo después del destete y altos niveles de cobre en los dos últimos tercios de la transición.

Se utilizaron un total de 216 lechones al destete (peso inicial de 6,17 kg y 21 días de vida) en una prueba de 42 días para comparar los efectos de la suplementación de zinc y cobre cambiando los regímenes de minerales sobre los rendimientos productivos y los niveles plasmáticos de minerales. Los 6 tratamientos experimentales incluyeron un diseño factorial 2 x 2 siendo los efectos principales la adición de cobre como sulfato de cobre (0 o 125 ppm) y la adición de zinc como óxido de zinc (0 o 3000ppm de los 0 a los 14 días y 0 o 2000 ppm de los 14 a los 42 días). Para los dos tratamientos restantes se ofreció zinc solo o la combinación de zinc y cobre de los 0 a los 14 días, con sulfato de cobre de los 14 a los 42. Se utilizaron 6 corrales con 6 lechones por corral. Todas las dietas fueron suplementadas con 165 ppm de zinc y 16,5 ppm de cobre procedentes de un premix de minerales traza. Se recogieron muestras de plasma de dos lechones por corral a día 14 y 42.

Desde día 0 a 14, la GMD, CMD e IC se vieron mejorados (P<0,04) por la adición de zinc. La suplementación de cobre tendió a aumentar (P<0,07) el CMD de 0 a 14 días. De los 14 a los 42 días la adición de cobre aumentó (P<0,003) la GMD y el CMD. Durante todo el período experimental, la suplementación contínua de zinc aumentó (P<0,03) GMD y tendió a aumentar (P<0,09) el CMD. La adición de cobre también aumentó (P<0,004) la GMD y el CMD cuando fue ofrecido desde los 0 a los 42 días. Los valores más ventajosos en cuanto a CMD y GMD se observaron para aquellos tratamientos que contenían altos niveles de zinc de los 0 a los 14 días y valores elevados de cobre de los 14 a los 42 días. La adición tanto de zinc como de cobre aumentaron (P<0,02) los costes de pienso por kg de ganancia de peso. Sin embargo, el retorno sobre los costes de pienso fue mejor (P<0,006) con la adición de cobre, con el mayor valor obtenido cuando se ofrecieron altos niveles de zinc de 0 a14 días y altos niveles de cobre de los 14 a los 42 días. Los niveles plasmáticos de zinc se vieron aumentados (P < 0,001) a día 14 por la suplementación de zinc.

Se puede concluir que la pauta óptima desde el punto de vista productivo fue la suplementación con zinc de 0 a 14 días y con sulfato de cobre de 14 a 42 días post-destete.