Efecto de la espirulina en el rendimiento, la digestibilidad de los nutrientes y la calidad de la carne en lechones en transición

Los cereales y la harina de soja son las principales fuentes de energía y proteínas utilizadas en alimentación porcina. Los elevados costes económicos y medioambientales asociados con la producción y transporte de dichos piensos y su competencia directa con el consumo humano tienen importantes implicaciones para la sostenibilidad de la producción animal y de piensos. Por lo tanto, se necesitan con urgencia fuentes alternativas de proteínas. Las microalgas se han caracterizado por tener un alto contenido de proteínas, carbohidratos y grasas. Una de las microalgas más usadas es la espirulina (Arthrospira platensis), una cianobacteria. El objetivo de este estudio fue evaluar el efecto de la espirulina en dietas de lechones sobre el rendimiento del crecimiento, la digestibilidad de los nutrientes y la calidad de la carne. Se utilizaron cuarenta lechones machos en transición. Los lechones fueron asignados a uno de cuatro tratamientos dietéticos (n = 10): dieta base de cereales y harina de soja (control); dieta base con 10% de espirulina (SP); dieta SP suplementada con un complejo multienzimático al 0,005% producido por Talaromyces versatilis y dieta SP suplementada con lisozima al 0,01%.

El rendimiento del crecimiento se vio afectado negativamente por la incorporación de espirulina en las dietas, con una disminución promedio de 9,1% sobre el peso final, en comparación con el grupo control. La digestibilidad aparente del tracto total (DATT) de la proteína bruta fue mayor en el grupo control que en otros grupos. Además, la lisozima aumentó la DATT de la grasa bruta y la fibra ácido detergente, en relación con los grupos SP y control, respectivamente. La incorporación de espirulina, individualmente y suplementada con enzimas, no afectó la calidad de la carne. Sorprendentemente, con la inclusión de espirulina no se observó ningún efecto protector contra la oxidación de lípidos en la carne de cerdo después de 7 días de almacenamiento.

Este estudio indica que el rendimiento de crecimiento de los lechones en transición se vio afectado por la incorporación del 10% de espirulina en las dietas, lo cual está mediado por un aumento de la viscosidad de la digesta y una menor digestibilidad de las proteínas, como consecuencia de la resistencia de las proteínas de las microalgas a la acción de las peptidasas endógenas. La eficacia de la lisozima en la degradación de la pared celular de la espirulina en el intestino del lechón, con la consiguiente liberación de compuestos nutricionales, es un resultado importante de este trabajo.