Reduciendo el estrés al destete: ¿hay que considerar la socialización predestete como estrategia?

John Pluske
10-sep-2021 (hace 3 años 3 meses 14 días)

En mi último artículo, describí cómo los lechones recién destetados se encuentran con un gran número de factores estresantes (desafíos) repentinos y simultáneos que pueden comprometer su estado sanitario y función inmune y, por lo tanto, su salud y bienestar, pudiendo tener consecuencias a largo plazo para algunos lechones en cuanto a su rendimiento posterior, supervivencia, enfermedades y respuesta a factores estresantes experimentados más adelante. Hablé sobre cómo la preparación de un entorno físico adecuado, la facilitación de la transición nutricional de leche a pienso sólido y la optimización del manejo sanitario, pueden reducir el alcance de los efectos negativos que el destete puede tener sobre la producción y el bienestar. Sin embargo, y pese a estos esfuerzos, el hecho es que la práctica habitual de mezclar lechones que no se conocen (que no son de la misma camada) al destete produce agresiones y peleas que a su vez pueden resultar negativos para el bienestar, la sanidad y el rendimiento, junto con la activación de las respuestas al estrés de los lechones.

Se han probado numerosas estrategias para reducir las agresiones al destete, por ejemplo, distribuir los lechones en corrales según su tamaño (p.e.: dividirlos en 3 grupos según el peso), usar fármacos y compuestos selectivos, feromonas, enmascaradores de olores y tranquilizantes; aumentar los niveles dietéticos de triptófano para modular la serotonina en el cerebro o reducir la iluminación de la nave. Sin embargo, estos métodos tienden a ser poco prácticos o infructuosos y, cuando se observa cierto éxito, las respuestas tienden a ser variables y de corta duración. Una aproximación alternativa para reducir las peleas al destete, favorecer el bienestar de los lechones y mejorar el desarrollo socio-cognitivo, la salud y la producción, es familiarizar los lechones que no proceden de la misma camada entre sí antes del destete, durante la lactación, de modo que cuando se desteten y alojen juntos en la transición, la adaptación social sea mejor y se reduzca el antagonismo entre los lechones que no son compañeros de camada. Esto puede tener más beneficios para la adaptación post-destete además del comportamiento, por ejemplo, una mayor familiarización con el "creep feed" antes del destete puede reducir la latencia hasta la primera ingesta tras el destete. Esta idea de socialización pre-destete imita, hasta cierto punto dependiendo del sistema implementado en la maternidad, el comportamiento de la cerda y los lechones en condiciones de libertad (naturales). Aquí los lechones están predispuestos a formar vínculos sociales y formar parte de varios comportamientos, incluyendo juegos beneficiosos, desde las dos semanas de edad.

El concepto de socialización (o mezcla) de lechones antes del destete, para obtener buenos resultados de bienestar, sanitarios y (o) productivos post-destete, no es necesariamente nuevo, ya que se remonta a más de 25 años. Sin embargo, su implementación generalizada se ha visto limitada por motivos prácticos en la sala de partos y quizá por desconocimiento de la industria de sus posibles funciones y beneficios para la producción porcina actual. Sin embargo, e impulsado por cuestiones que incluyen la futura viabilidad de las jaulas de parto "tradicionales", una mayor preocupación por el bienestar, el incremento del tamaño de la camada y nuestro conocimiento de la necesidad de que los lechones recién destetados tengan un buen comienzo en la transición, recientemente ha habido un interés creciente en este concepto. Esto se refleja en el cada vez mayor número de publicaciones científicas y artículos aparecidos durante los últimos 5-10 años.

Entonces, ¿cómo puede realizarse la socialización predestete (o mezcla) de los lechones? En la práctica, los métodos de socialización en la producción en naves ("indoor") suelen incluir: (i) sistemas que permitan mezclar sólo los lechones mientras que las cerdas permanecen encerradas en sus jaulas, p.e.: creando puertas para lechones entre corrales de parto contiguos, eliminando divisiones entre corrales de parto contiguos y (o) proporcionando acceso a una zona adicional para lechones (figura 1; tipo "guardería"); o (ii) sistemas de alojamiento en grupo (sistemas de “lactancia múltiple”), donde tanto las cerdas como los lechones pueden interactuar libremente, p.e.: eliminando una división a la entrada de la sala de partos, eliminando todas las divisiones de la sala de partos o incluso pasando a las cerdas y lechones de un sistema de alojamiento individual a uno de alojamiento en grupo (figura 2). Cualquiera de los sistemas permite extender la edad de destete, aumentar el área disponible para "creep feed" y la cubrición de las cerdas durante la lactancia. Como puede preverse, hay muchas ventajas y desventajas asociadas a cada sistema y la implementación práctica de cualquiera de ellos comporta mucha consideración y reflexión, a causa de la inversión requerida (mano de obra, rediseño). Naturalmente, en sistemas "outdoor" no existen algunas de estas limitaciones.

<p>Figura 1. Un ejemplo de un sistema de &ldquo;guarder&iacute;a&rdquo; en el que lechones de diferentes camadas pueden mezclarse e interactuar libremente, mientras que las cerdas permanecen confinadas en las jaulas (seg&uacute;n Novotni-Dank&oacute; et al., 2021).</p>

Un ejemplo de corrales de lactancia grupal donde tanto las cerdas como los lechones pueden mezclarse e interactuar

Una característica común de la mezcla de lechones de camadas distintas es el aumento de las agresiones (figura 3), con perturbaciones también en el comportamiento de la cerda que incluyen posibles daños a pezones o cambios en la frecuencia de amamantamiento, el comportamiento de succión de los lechones y la reducción del crecimiento de los lechones, aunque estos efectos suelen ser transitorios. Por el contrario, los hallazgos indican que los lechones socializados aprendieron habilidades sociales que los beneficiaron a largo plazo, permitiéndoles formar jerarquías más rápidamente en los futuros encuentros agresivos con lechones desconocidos tras el destete. Además, socializar lechones a una edad temprana mezclando camadas antes del destete no sólo puede tener un efecto positivo sobre el comportamiento (más juego, menos peleas) y el rendimiento tras el destete sino que también puede afectar a su fisiología. Un estudio reciente de Saladrigas‑García et al. (2021) examinó el impacto de la socialización temprana y el enriquecimiento ambiental (con juguetes) de los lechones lactantes sobre su microbiota cecal y respuestas metabólicas antes (-2 días) y tras el destete (+ 3 días). Estos autores describieron una falta de efectos de la socialización y el enriquecimiento pre-destete pero, tras el destete, las diferencias en la estructura microbiana, la reducida expresión yeyunal de los genes TLR2 (receptores tipo Toll 2, un receptor transmembrana que juega un papel fundamental en el reconocimiento de patógenos y la activación de la inmunidad innata) y la reducción de metabolitos (incluyendo triglicéridos y ácidos grasos) sugirieron un impacto en la reducción del metabolismo consistente con una reducción de los comportamientos agresivos en estos animales.

<p>Figura 3. Medias de m&iacute;nimos cuadrados y errores est&aacute;ndar de la puntuaci&oacute;n de lesiones acumuladas en lechones destetados previamente alojados en AG pre-destete (alojamiento grupal) o en AI (alojamiento individual). Las diferencias significativas se indican con letras diferentes (p &lt;0,05) (de Schrey et al., 2019).</p>

En general, los datos experimentales y las experiencias anecdóticas parecerían sugerir que la creación de un entorno enriquecido física y socialmente en las primeras fases, como la socialización o mezcla, puede modificar positivamente la respuesta de los lechones al disminuir el impacto del estrés social.