Generalmente la bioseguridad se ha basado en el cumplimiento subjetivo de protocolos cuyo seguimiento nunca se podía garantizar completamente. Actualmente, estas medidas teóricas de control se pueden complementar con nuevos enfoques y tecnologías que disminuyan el riesgo de incumplimientos o fallos en su aplicación.
Importancia de la bioseguridad
La bioseguridad se define como la implementación de medidas para reducir el riesgo de introducción y propagación de patógenos, que mejoran el estado sanitario y reducen la necesidad de antibióticos.
En nuestro equipo, cuando realizamos auditorías de bioseguridad encontramos errores muy similares en todo el mundo, relacionados con incumplimientos del protocolo o desviaciones que no son aceptables, ya que no suele existir la figura del responsable de bioseguridad que controle las mismas. Además, el trabajo del responsable se complica por no disponer de herramientas objetivas de medición de los parámetros controlados. Al margen de este tipo de evaluaciones, no contábamos con otras formas de medir de forma objetiva el nivel de bioseguridad de una empresa o granja.
Creando un nuevo tipo de datos
La bioseguridad se caracteriza por ser un concepto transversal y que afecta a todas las áreas de producción y, lo que añade gran complejidad a su control efectivo, resultando por tanto de gran ayuda cualquier sistema que nos ayude a ese control y más de una manera objetiva, cuantificable y automática (Figura 1).
El control subjetivo abarca el enfoque clásico que se viene efectuando hasta ahora y que está basado en la recopilación de datos de las granjas, encuestas y listas de verificación de las tareas establecidas. Para llevar a cabo este control de manera óptima, recomendamos seguir los siguientes dos pasos:
Por otro lado, el control objetivo se basa en datos cuantificables que pueden ser obtenidos de tecnologías digitales, capaces de registrar de manera precisa y almacenar información relacionada con la bioseguridad, tanto externa como interna.
Aunque la bioseguridad externa es, posiblemente, la más avanzada en granjas convencionales, existen pocos datos disponibles. Y, para abordar esa brecha, aparecen dos opciones:
Próximamente veremos cómo controlar de manera objetiva la bioseguridad interna, que tiene como objetivo principal prevenir que una enfermedad ya existente en la granja se propague a otras zonas. Veremos también qué datos se generan y cómo podemos utilizarlos.