Una imagen vale más que mil palabras... aún más cuando se habla de bioseguridad en la granja

Carmen Alonso García-Mochales
09-abr-2019 (hace 5 años 7 meses 12 días)

El control de enfermedades sigue siendo una de las áreas más difíciles para los productores de cerdos y los veterinarios porcinos de todo el mundo. Amenazas como la entrada de una cepa de un virus que es endémica en una región (por ejemplo, PRRS) o la aparición de una enfermedad transfronteriza altamente virulenta (por ejemplo, PPA) son factores importantes que hacen que la bioseguridad efectiva sea una de las medidas más importantes que protegen cualquier inversión en producción porcina. Este artículo es el segundo de una serie que se centra en la segregación de zonas en la granja. Describiremos tres videos que ilustran cómo hacer una transición apropiada entre zonas clave, limpias y sucias. En cada uno, las zonas sucias se indicarán con el color gris, las zonas limpias con el color blanco y el color rojo indicará un potencial evento de contaminación.

Entrada a granja

Una entrada danesa consiste en un banco que actúa como una barrera entre las zonas limpias y sucias de la granja. En este vídeo, nuestro visitante llega con su coche a la granja. Sus manos y zapatos rojos indican que están potencialmente contaminados. El exterior de la instalación es considerado como el lado sucio (gris). El banco es la marca que indica que se necesita un cambio de calzado para ingresar a la zona intermedia o "de solo calcetines" (líneas blancas y grises). Es fundamental que, cuando se quita los zapatos, los pies descalzos no pisen el área exterior, "sucia". Evitar ese contacto, evitará un cruce entre zonas y una posible contaminación con la ropa y las botas de la granja. Si es posible, la ropa exterior debe colgarse en la zona sucia del vestidor (como mínimo, deben colgarse en la zona intermedia). Después de lavarse las manos, el visitante ya puede vestirse con la ropa limpia de la granja y ponerse el calzado limpio que encontrará en la zona limpia. Será útil proporcionar material que explique cómo entrar correctamente en la granja y diseñar carteles comprensibles y claros para cada zona, que indiquen qué hacer en cada punto. Si es necesario, hay que plantearse traducirlos a diferentes idiomas para una interpretación más clara.

Muelles de carga

Cargar cerdos para transportarlos a matadero puede ser tan estresante para los cerdos como para los trabajadores. Las instalaciones de carga mal diseñadas aumentan la incidencia de la intervención del trabajador, el estrés en los animales y las personas, alargan los tiempos de carga y, desde la perspectiva de la bioseguridad, aumentan las posibilidades de cometer errores. En el segundo vídeo, un camión potencialmente contaminado llega al muelle de carga de la granja. El conductor del camión y el granjero se colocan en sus posiciones: el granjero se queda en el lado limpio del muelle y envía los cerdos al camión, mientras que el camionero permanece al otro lado y recibe a los cerdos. Una carga bien diseñada permitirá que los cerdos se muevan fácilmente en la dirección correcta con la mínima intervención. Hay que prevenir el movimiento de animales y personas hacia atrás entre zonas sucias y limpias para minimizar el riesgo de contaminación del camión hacia la granja.

Valla perimetral

La valla perimetral de la granja es la primera línea de defensa que controla la entrada de personas, vehículos y animales, especialmente jabalíes. Para funcionar correctamente, la cerca perimetral debe rodear todos los edificios de la granja, debe mantenerse en buen estado sin aperturas evidentes (lo que incluye la puerta) y debe permanecer libre de vegetación. Idealmente, se recomienda enterrarla a una profundidad de 18 cm en el suelo, o como mínimo, estar en contacto con el suelo. Como barrera primaria, debe inspeccionarse por completo al menos una vez al mes. En el tercer vídeo, un estado incorrecto del vallado (es decir, una puerta abierta) permite la entrada de un animal salvaje en el área de control de tráfico. Este hecho aumenta el riesgo de transmisión de enfermedades al edificio principal al permitir la contaminación de la zona directamente adyacente a la granja de cerdos.