Efectos de los ácidos grasos de cadena corta y media sobre la salud intestinal de los lechones

Jürgen Zentek
16-jul-2018 (hace 6 años 4 meses 8 días)

El problema de la diarrea post-destete sigue siendo de una gran importancia práctica para los productores de lechones, causa sufrimiento y pérdida de animales y puede tener efectos sustancialmente negativos sobre la rentabilidad debido a la caída del rendimiento y de la conversión. Las cepas enterotóxicas de Escherichia coli son la causa principal de la diarrea postdestete y se ha evidenciado que sus efectos sobre el intestino pueden ser contrarrestadas por dietas optimizadas. Tras la prohibición del uso de antibióticos como promotores del crecimiento, se ha desarrollado un amplio abanico de estrategias nutricionales para afrontar mejor el problema de los desórdenes digestivos en condiciones de campo. Por lo que atañe a las dietas optimizadas, los aditivos del pienso están emergiendo como alternativas a los antibióticos clásicos, aunque su efecto "antimicrobiano" no es probablemente el único modo de acción cuando se incluyen a las concentraciones habituales en el pienso: pueden actuar más como "reguladores del microbioma". En muchos estudios se ha encontrado que su uso puede tener un efecto positivo sobre el rendimiento animal, probablemente porque afectan la función y la salud intestinal.

Los ácidos grasos de cadena corta (AGCC) tienen 1-4 átomos de carbono y sus sales juegan un papel importante. Su uso en pienso para lechones es muy común. En contraste con los ácidos libres, las sales de los ácidos orgánicos son inodoras, tienen una volatilidad baja y una elevada solubilidad en agua. En comparación con los ácidos libres, la adición de sales es más fácil de manejar en la producción de pienso para animales.

Los ácidos grasos de cadena media (AGCM) se utilizan como ácidos libres, como triglicéridos y como sales de destilados de ácidos grasos. Los ácidos grasos de cadena media se encuentran naturalmente como parte de los triglicéridos en la grasa de la leche y en varias grasas vegetales como el aceite de coco, de palmiste o el de la semilla de Cuphea.

El modo de acción exacto de los ácidos grasos de cadena corta y media todavía está en discusión. Parece multifactorial y depende de la concentración en la dieta, la composición del alimento y la situación específica del microbioma en las granjas, que es un factor importante pero aún muy desconocido.

Varios estudios han mostrado que los efectos antibacterianos de los ácidos grasos de cadena corta y media son particularmente relevantes cuando el quimo se encuentra a pH bajos. Tanto los AGCC como los AGCM son ácidos orgánicos débiles, es decir, a pH altos están presentes básicamente en forma de sales, lo que reduce su penetración a través de la pared celular bacteriana. Eso se considera un prerrequisito importante para su eficacia antibacteriana. La reducción del pH dentro de la bacteria causa un daño irreversible a enzimas bacterianos importantes, lo que puede llegar a inhibir el crecimiento o provocar la muerte bacteriana.

Varios estudios han mostrado que el uso de AGCC y AGCM y triglicéridos puede reducir significativamente la diarrea en la fase post-destete. Puede asumirse que el efecto estabilizador de los ácidos orgánicos en el tracto digestivo ya se produce en el tracto digestivo superior, es decir en el estómago. Los AGCM con 6-12 átomos de carbono tienen efecto antibacteriano si las concentraciones en el pienso son relativamente altas. Los triglicéridos con AGCM han mostrado efecto en la salud de los lechones y su microbiota intestinal, tanto en el estómago como en el intestino delgado. Además de los efectos de los ácidos grasos sobre la microbiota intestinal y sobre la salud intestinal, producen sustratos interesantes para el metabolismo intermediario de los lechones. Se ha demostrado, por ejemplo, que el ácido butírico es un sustrato importante para el metabolismo energético de los enterocitos.

Los AGCM se absorben rápidamente, independientemente de la secreción biliar, y pueden ser utilizados en el tejido intestinal y en el hígado para la producción de energía. La rápida absorción de los AGCC y AGCM ha iniciado un interesante desarrollo que ha llevado a los ácidos "protegidos" o "encapsulados". El objetivo es conseguir un mayor eficiencia en el tracto digestivo inferior, lo que se ha demostrado en diversos estudios.

El impacto de los AGCM, que se ha estudiado menos que el de los AGCC, se resume en la tabla 1.

Tabla 1: Efectos nutricionales y fisiológicos en lechones de los triglicéridos de cadena media (TCM)
y de los ácidos grasos (Zentek et al. 2011)

Digestión y absorción

  • Hidrólisis rápida de TCM en comparación con los triglicéridos de cadena larga.
  • Solubilidad elevada en agua.
  • No necesita ser emulsionado por la bilis.
  • Absorción rápida.

Metabolismo

  • Utilizado eficientemente para la producción de energía por beta-oxidación mitocondrial.
  • Fuentes de energía disponibles de inmediato para neonatos y animales jóvenes.
Morfología y fisiología intestinal
  • Los AGCM pueden ser utilizados directamente por los enterocitos para la producción de energía.
  • Ayudan a mantener la integridad del tejido intestinal.
Microbiota intestinal
  • Efectivos como surfactantes aniónicos.
  • Efectos antibacterianos, dependiendo de la dosis, la mayoría de estudios demuestran su eficacia contra bacterias Gram positivas.
Rendimiento de los lechones
  • Los estudios sugieren efectos positivos.
  • Modo de acción relacionado con el efecto epitelial o microbiano.
  • Se necesita más investigación en este campo.

La mayor parte del trabajo publicado muestra claramente que el uso de ácidos grasos en cerdos tiene beneficios para la salud, que la mayor parte de ellos tiene un efecto conservante para el pienso y que el rendimiento de los animales en general está influenciado positivamente. Como resultado, ahora están firmemente consolidados en la industria de la alimentación animal.