Caso clínico: Mordeduras de cola en un granja de cerdos con cola intacta

Annalisa Scollo
29-jun-2018 (hace 6 años 4 meses 23 días)

Para cumplir con la legislación europea sobre bienestar porcino (2008/120/EC), una empresa intensiva multisitio con 1200 cerdas en bandas cada 3 semanas situada en Italia decidió dejar de cortar las colas a toda su producción destinada a cerdos pesados (peso de sacrificio de casi 170 kg). El sitio donde se presentaron más problemas de manejo derivados de esta decisión fue en el destete, ubicado en una zona independiente de las cerdas y del engorde. La nave en cuestión tiene unas características muy comunes a otras transiciones convencionales, con un suelo de slat de plástico (según la normativa), corrales de casi 60 animales, ventilación forzada, y una alimentación seca en harina ad libitum. Cada banda está compuesta por casi 1800 lechones, de unos 7 kg de peso y se observa el todo dentro/todo fuera. El espacio por animal se mantiene dentro de los límites legales, teniendo en cuenta que el traslado al engorde se realiza a los 30 kg de peso (ver tabla 1).

Tabla 1. Resumen de las superficies libres disponibles para cada cerdo durante el destete
y el principio del engorde según la legislación europea (2008/120/EC).

Superficie mínima por ley Grupo de peso
0,15 m2 <10 kg
0,20 m2 10 - 20 kg
0,30 m2 20 - 30 kg
0,40 m2 30 - 50 kg

La mortalidad media del sito es cercana al 3,5% y, durante la lactación, los animales se vacunan sistemáticamente frente a Mycoplasma y PCV2. A continuación se les administra la vacunación frente a Aujeszky como dicta el protocolo nacional.

Aunque los animales ya disponían de cadenas y de objetos de plástico en el suelo como enriquecimiento ambiental, se añadió un elemento nuevo al tomar la decisión de interrumpir el corte de colas: troncos de madera unidos a una cadena metálica con discos de plástico que colgaban del techo en, al menos dos puntos de cada corral, para que el máximo número de animales pudiese llegar a ellos. La cadena y los troncos llegaban hasta el suelo para ser accesibles, pero sin ensuciarse.

Inicio del fenómeno de canibalismo de colas y consecuencias sobre la producción

Desde el primer lote de animales con la cola intacta surgieron problemas de mordeduras, hacia los 15 kg. Estos problemas persistían y se exacerbaban hasta que los animales eran trasladados al engorde, donde desaparecían al cabo de poco tiempo. Al inicio del problema, se observaban una multiplicación rápida de las lesiones de cola, hasta llegar a una prevalencia de casi el 30% de los animales con heridas graves, con sangre y costras, infecciones evidentes y, en muchos casos, la pérdida de una gran cantidad de tejido que implicaba una reducción de la longitud de la cola (figura 1).

<p>Figura 1. Una lesi&oacute;n grave en un cerdo de casi 15 kg en la que incluso se produjo la p&eacute;rdida de una parte de la cola.</p>

La distribución del fenómeno parecía totalmente aleatoria entre las diferentes salas y corrales. Muy a menudo sucedía que, dentro de la misma sala, entre dos corrales adyacentes y aparentemente idénticos, uno presentaba el problema con una gran intensidad y el otro no. En un primer análisis, los parámetros productivos (mortalidad, incremento de peso, rendimiento) del destete no se vieron afectados por el episodio de mordeduras y tan sólo se detectó un ligero aumento del coste relacionado con el tratamiento antibiótico inevitablemente asociado a la presencia de las lesiones. Sin embargo, aunque el fenómeno se resolvía completamente al trasladar los animales de la transición al cebo, las pérdidas más evidentes se presentaron en la fase de engorde. En especial, la mortalidad media de la última fase de crecimiento aumentó un +2,5% a causa de los animales que, aunque ya hacía semanas del evento agudo de mordeduras, mostraron mielitis e infecciones ascendentes a lo largo de la columna vertebral, viéndose comprometidos parcial o totalmente sus movimientos. Afectaba tanto a animales que no se podían cargar en el camión hacia el matadero (por esta causa), como los que sí que se mandaban a matadero, sin que presentaran ningún signo aparente, pero que mostraban abscesos en la columna vertebral que requerían decomisar una parte importante de la canal (figura 2).

<p>Figura 2. Absceso localizado a lo largo de la columna vertebral debido a una infecci&oacute;n ascendente tras una lesi&oacute;n en la cola, ahora ya cicatrizada.</p>

Identificación de la causa

La mordedura de colas tiene un origen multifactorial, por lo que el origen se relacionaba con una situación de estrés potencialmente atribuible a multitud de causas. En base a las directrices de la Comunidad Europea del informe de la EFSA 2007 (The risks associated with tail biting in pigs and possible means to reduce the need for tail docking considering the different housing and husbandry systems), se analizaron los factores de riesgo presentes en la granja que podían ser los principales causantes del fenómeno de canibalismo. A continuación se enumeran los cinco principales (ver el informe de la EFSA 2007 para encontrar la lista completa).

1. Calidad del aire y del microambiente

La interacción entre el inicio del canibalismo y los parámetros del aire y del microambiente es compleja, ya que también implica factores como la estacionalidad y el clima. Sin embargo, se puede simplificar subrayando la importancia de una correcta velocidad y dirección del flujo de aire dentro de la nave. De hecho, si las corrientes de aire se dirigen accidentalmente hacia los animales, aunque sean casi imperceptibles (>0,2 m/s), pueden aumentar el nerviosismo. Al mismo tiempo sin embargo, la ventilación debe mantenerse a niveles suficientes para garantizar la renovación del aire y la oxigenación del ambiente. En la granja del caso se realizó una verificación del flujo de aire mediante fumígenos y se cuantificaron los gases nocivos (CO2 y amoníaco), sin encontrar ninguna disconformidad.

2. Competencia por los recursos

Un elemento extremadamente estresante dentro de un grupo de animales es la falta de acceso a los recursos, especialmente al alimento. Si no hay suficiente espacio en los comederos, sólo tendrán acceso los animales más grandes o dominantes, creando un estado de frustración en los subordinados. No es casualidad que los animales que muerden sean los más pequeños del grupo, que atacan a sus compañeros de corral en el comedero. Aunque este aspecto tampoco representó un factor de riesgo en la granja que nos ocupa (tabla 2).

Tabla 2. Parámetros de referencia de acceso a recursos (de Managing Pig Health, 2nd edition).

Agua
Tipo di bebedero Alimentación racionada Alimentación ad libitum
Chupete 1:10 1:15
Cazoleta 1:20 1:30
Pienso
Peso de cerdo Alimentación racionada Alimentación ad libitum
5 100 mm 75 mm
10 130 mm 33 mm
15 150 mm 38 mm
35 200 mm 50 mm

3. Densidad

Es quizá uno de los parámetros más importantes para la correcta prevención de las mordeduras de cola. Es evidente que cuanto más espacio tengan los animales, menor será el riesgo de aparición del canibalismo. Sin embargo, la reducción de la densidad tiene repercusiones económicas bastante importantes ya que, con el mismo espacio y los mismos gastos fijos, se producen menos cerdos. La densidad de esta granja se mantenía dentro de los márgenes legales (tabla 1). Sin embargo, en un análisis más preciso, se observó que a finales de la transición, había retrasos frecuentes en el traslado al engorde, y casi siempre había animales a 0,30 m2/cabeza, incluso más allá del peso recomendado (20-30 kg). Una vez identificado el problema, se planificaron con mayor atención los movimientos en los siguientes lotes.

4. Enriquecimiento ambiental

Este aspecto es tan importante que fue objeto de un segundo informe de la EFSA en 2016 (Best practices with a view to the prevention of routine tail-docking and the provision of enrichment materials to pigs). El tronco con la cadena se considera poco adecuado para los cerdos porque sólo es parcialmente comestible y no favorece la investigación (el cerdo no puede expresar su comportamiento natural de hozar). Por lo tanto se decidió proporcionar paja dentro de un comedero metálico de rastrillo, fijado a la pared o situado en el centro del corral. Para reducir el riesgo de atasco del slat o de la fosa y garantizar que pudiesen manipular la paja caída al suelo, debajo de este comedero de rejilla se fijó una alfombrilla (figura 3).

<p>Figura 3. La paja se ofrece dentro de un comedero de rastrillo, con una alfombrilla fijada debajo para crear una zona en la que hozar.</p>

5. Gestión de los animales problema

La formación del personal es fundamental. Es muy importante aprender a reconocer las mordeduras tan precozmente como sea posible para aislar al animal que inicia las mordeduras del resto del grupo. Normalmente este fenómeno empieza con un único animal más nervioso que agrede primero. Si se consigue detener inmediatamente a este animal, a menudo la situación se soluciona por sí misma. Por el contrario, si aumenta el número y la gravedad de las lesiones, otros animales empiezan a morder, ya sea porque les atrae la sangre en las colas o por imitación de sus compañeros. Por lo tanto el personal adquiere todavía más importancia en la prevención y debe convertirse en un observador escrupuloso. La empresa ha iniciado un programa de formación continuada.

Situación a los dos años

¡La gestión de los animales con cola intacta en una granja convencional no es fácil! Sin embargo, no es imposible. La inclusión de un correcto enriquecimiento ambiental y su manejo adecuado, pese al suelo enrejado, un mayor cuidado en no superar los límites de densidad y la formación continuada del personal han permitido lograr un buen equilibrio entre la productividad y el bienestar animal, aunque se trate de animales de peso elevado (170 kg).