Importancia de la dinámica de infección del PCV2: la edad de la infección es determinante
Cada vez es más evidente que la dinámica de infección de la infección por PCV2 de cada granja está fuertemente relacionada con las probabilidades de sufrir enfermedades asociadas a PCV2 (PCVD). Los primeros estudios de casos que se realizaron en Francia (2000-2001) y España (2002-2003) mostraron una prevalencia más elevada de cerdos seropositivos a PCV2 a las 12-13 semanas de edad en granjas afectadas por PCVD. Esto sugiere que la infección por PCV2 se produce antes en granjas con PCVD. Otros estudios más detallados (longitudinales por lotes) llevados a cabo en granjas afectadas por PCVD confirmaron que cuanto antes se produzca la infección, mayor será el riesgo de desarrollar PCVD. La edad de la infección está fuertemente influenciada por la ingesta de anticuerpos maternos a través del calostro. La inmunidad maternal contra PCV2 puede proteger los lechones frente a PCVD y esta protección se ha visto que es dependiente de la titulación de anticuerpos. Además, los anticuerpos maternales reducen de forma significativa la transmisión del virus entre lechones del mismo corral lo que baja la probabilidad de una infección masiva durante las semanas siguientes al destete.
Lechones afectados por PMWS y PDNS
Las coinfecciones como principal desencadenante de la patogenicidad de PCV2
En la literatura se han reportado un amplio número de infecciones concomitantes asociadas a PCVD. Sin embargo; PPV, PRRSV y Mycoplasma hyopneumoniae son los principales patógenos que han mostrado que potencian las lesiones asociadas a PCV2 e incrementan la incidencia de PCVD bajo condiciones de campo y experimentales. Los mecanismos no se conocen bien pero parece que todas estas coinfecciones puedan provocar un potenciamiento no específico del sistema inmune, favoreciendo la replicación del PCV2 en las células diana.
Además, el papel de la inmunoestimulación, combinada con la inoculación de PCV2, en la inducción de la enfermedad clínica ya fue demostrado en los años 2000. Investigaciones posteriores llevaron a sugerir que la inmuniestimulación potenciaba la replicación del PCV2, resultando en una activación masiva de algunas células, como macrófagos en los tejidos limfoides. Debido a la imposibilidad de inducir PCVD sólo con la infección por PCV2, junto con la presencia ubicua del virus en la población mundial, se ha especulado que las PCVD pueden estar desencadenadas por un agente desconocido (llamado a menudo el "agente X"). Sin embargo, todavía no se ha conseguido identificar este "agente X". Por tanto, el papel central del PCV2 en las PCVDs se mantiene intacto y el "agente X" puede considerarse como algún agente ya conocido y que no es siempre el mismo en las diferentes áreas geográficas.
Hipertrofia de los ganglios linfáticos inguinales
Las condiciones de cría y manejo modifican significativamente el curso de la infección por PCV2 con implicaciones directas en el desenlace clínico
A partir de la aparición de PMWS y otras enfermedades relacionadas con PCV2 (PCVDs), varios estudios epidemiológicos han verificado que el manejo en granja, el alojamiento y las condidiones de cría están estrechamente ligados al riesgo de desarrollar PCVDs. Estos factores se clasifican en las siguientes categorías:
Es probable que estas condiciones de granja puedan ser el detonante para una replicación masiva de PCV2 directa e indirectamente. Por otro lado, recientemente se ha demostrado mediante modelización que la dinámica de PCV2 en granjas está fuertemente afectada por el manejo de la granja y las condiciones de cría.
Además, a pesar de disponer de varias vacunas eficaces en el campo frente a PCV2 las consecuencias de la infección siguen manifestándose, por lo que las buenas prácticas de manejo no deberían olvidarse ya que se ha demostrado que su eficacia se reduce drásticamente por efecto de algunas prácticas de manejo como exceso de adopciones, mezclas de lechones después del destete o alojar lechones en grupos grandes en las transiciones. Para algunas personas, las PCVDs eran de algún modo enfermedades provocadas por el hombre ya que el virus ya estaba presente en la población porcina décadas antes de que apareciera la enfermedad. Esto no debería olvidarse ya que a menudo la elevada eficacia de la vacunación provoca que se relajen las buenas prácticas de manejo en la granja.