BPEX 2TS breeding. Research into action noº 10. Seasonality in Pigs.
04-ago-2011 (hace 13 años 3 meses 18 días)Un equipo de la universidad de Leeds (Reino Unido) llevó a cabo un estudio para determinar las variaciones estacionales en la producción.
Se concluyó que, para las cerdas en extensivo en el Reino Unido, varios días de clima cálido (temperatura media diaria superior a 18 °C) durante la lactancia y el destete reducen y hacen más variable la tasa de parto.
Figura 1. Tasa de partos en relación a 5 días consecutivos de calor durante las 5 semanas previas a la inseminación
La producción de calor aumenta a medida que avanza la lactancia paralelamente al incremento de la producción láctea, por lo que el pico de producción de calor y, por lo tanto, la mayor susceptibilidad al desarrollo de estrés por calor, es justo antes del destete.
Si las temperaturas ambientales son cálidas la cerda puede reducir su consumo de pienso de modo que no cubra las demandas metabólicas de lactancia, entonces movilizará a costa de su condición corporal y con posibles efectos adversos en el desarrollo folicular.
Las deficiencias nutricionales están asociadas con la reducción de la producción de la hormona luteinizante (LH), comportando repeticiones tardías y reducción de la fertilidad y de la tasa de parto.
En este estudio, las primerizas resultaron ser las menos afectados por las temperaturas más altas, probablemente porque no habían aumentado la demanda metabólica a causa de la lactación.
Para refrigerarse, las cerdas aumentan el flujo sanguíneo en la piel y tejido mamario, lejos de los ovarios. La calidad de sus óvulos y la preparación del útero para la gestación pueden verse afectados negativamente.
Los resultados de esta investigación sugieren la necesidad de disponer de instalaciones de refrigeración a las cerdas criadas en extensivo en el Reino Unido cuando la temperatura media diaria se eleva por encima de 18 °C.
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