Aumento de costes: necesidad de mejorar la eficiencia

La alimentación representa casi el 80 % de los costes variables y el 50 % de los totales. Entre agosto de 2006 y agosto de 2007, el precio del trigo se ha doblado.

La reducción de los costes de producción puede pasar por:

	Minimizar la ventilación – Muchos destetes tienen la ventilación al 20%, sin embargo, un destete limpio no requiere más del 5%.
	Iluminación – Adquirir el hábito de cerrar las luces. Puede ser interesante instalar un temporizador.
	Calefacción – Utilizar un termostato permite ahorrar hasta un 50% respecto a regular la calefacción manualmente.
	Agua – La ingesta de agua es crucial ya que está muy relacionada con el consumo y, por lo tanto con el crecimiento. Revisar y limpiar rutinariamente los bebederos y asegurarse del buen estado de las cubiertas de los depósitos.
	Higiene – Practicar un todo-dentro-todo-fuera si es posible. Revisar los protocolos de limpieza con el veterinario para asegurarse que es efectiva (diluyentes apropiados, diluciones correctas…)
	Movimiento de animales – Reduciendo los movimientos y las mezclas se mejora la sanidad y se minimiza el estrés.
	Consumo – Calcular regularmente la ingestión permitirá optimizar la formulación y detectar fluctuaciones, ayudando a detectar problemas.
	Nutrición – Revisar las estrategias alimentarias, la edad a que se cambian las dietas y la conversión. Recordar que no siempre lo más barato es lo mejor.
	Invertir en formación – Permite aumentar el número de cerdos que se pagan al precio máximo, mientras que reduce el coste de la mano de obra al ganar en eficiencia y productividad.
	Matadero – El personal de la última fase del cebo debe estar al tanto de los parámetros exigidos por el matadero para pagar al precio máximo. Hay que pesar a los animales de esta fase con regularidad y marcar a los que están a punto para el próximo camión para evitar sobrepesos y penalizaciones.