Los abonos orgánico-minerales

Laia Suriñach Ayats. Licenciada en Ciencias Ambientales. España ()

31-jul-2006 (hace 18 años 4 meses 24 días)
El enorme crecimiento de la población mundial y con ello el aumento de la demanda de alimentos y productos de primera necesidad ha condicionado el incremento de la superficie mundial cultivada y el desarrollo de técnicas de producción agrícola eficaces.

Problemática: Abuso de los abonos

Los cultivos requieren nutrientes indispensables para su crecimiento, aunque aquellos que la planta no puede asumir van a quedarse en el subsuelo e irán filtrándose hacia niveles freáticos inferiores. El abuso de nutrientes ha provocado la presencia de excedentes (N, P, K …) en el subsuelo y en las capas freáticas, poniendo en peligro la sostenibilidad medioambiental del territorio.

Hoy en día la fertilización en forma de estiércol o las aplicaciones de purines son una práctica habitual en todo tipo de cultivos y el adobado mineral complementario suele establecerse de forma rutinaria. Ésta última práctica utilizada en exceso también puede provocar importantes impactos ambientales.

Podemos definir los fertilizantes cómo cualquier sustancia que se aplique sobre el terreno y que contenga uno o varios de los elementos indispensables para aumentar el crecimiento de la vegetación: comprende el estiércol, los desechos de piscifactorías, los lodos de depuradora…

Por otra parte el compost son enmiendas obtenidas mediante un proceso de transformación biológica aerobia de materias orgánicas de diversa procedencia. Es de particular interés para las fincas que puedan disponer de deyecciones zootécnicas y materiales ligno-celulósicos de desecho (pajas, tallos) que son mezclados con las deyecciones, tal cual o tratadas. Como se verá a continuación, esta última práctica posee de muchos más beneficios que las prácticas de abono habituales.

El compost orgánico: características y ventajas

El compost orgánico está formado por compuestos estabilizados, higienizados y ricos en humus, elaborados exclusivamente a partir de deyecciones del ganado y de restos vegetales. Cabe decir que a diferencia del estiércol, el compost no hace mala olor, ni atrae moscas.

La cantidad de nutrientes del compost varía en función de diferentes factores tales como la tipología de residuo o subproducto utilizado. Es importante destacar que el compost orgánico contiene todos los nutrientes indispensables (macro y micro nutrientes) y que éstos son liberados de forma progresiva en el tiempo.

Fertilizantes orgánicos: ventajas representativas

  • Reducción de la contaminación ambiental: Llevar a cabo un abonamiento bien planificado favorece la optimización de los nutrientes aportados al suelo y la minimización de los niveles de nitrógeno residual. Este aprovechamiento se transforma en una mejora de las aguas del medio natural y contribuye a la potabilidad de esta, disminuyendo la posibilidad de contaminación de los acuíferos.

  • Minimización de costes: El uso de los abonos orgánicos procedentes de las deyecciones del ganado y de subproductos vegetales para la fertilización hace que el ciclo se cierre y que el suelo y el cultivo regresen a su equilibrio natural. De esta forma se obtiene que unos materiales obsoletos y sobrantes se transformen en un subproducto de provecho e idóneo. Finalmente se puede añadir que la substitución progresiva del abono mineral intensivo por un fertilizante orgánico en su mayor composición y mineral ayuda a incrementar la estructura del suelo y garantiza una sostenibilidad a largo plazo en el territorio cultivable y en definitiva en todo el ecosistema.

La Biotransformación

La Biotransformación es un concepto referido a una tecnología de compostaje específica de una determinada empresa gestora de deyecciones ganaderas. Este sistema de tratamiento consiste en un proceso microbiológico que se desarrolla en unas condiciones operacionales muy controladas y que transforma estandarizadamente los residuos orgánicos en fertilizantes estabilizados, higienizados y ricos en humus.

Esta tecnología utiliza un método biológico de tratamiento multiparamétrico que optimiza el coste del proceso y tiene lugar en una biocompostadora, es decir, una estación automatizada con una tecnología específica de última generación donde se obtiene, a partir de las deyecciones ganaderas, un compost de alta calidad mediante un proceso microbiológico aeróbico (con oxigeno). La biocompostadora se ubica a la misma explotación y ofrece importantes ventajas frente a otros sistemas existentes en el mercado:

  • Reduce la inversión
  • Genera un producto final de alta calidad
  • Elimina las olores
  • No depende de la climatología
  • Respeta el medio ambiente
  • Garantiza la trazabilidad del producto

Fases del proceso de la biotransformación:

Fase mesófila
Fase de colonización de microorganismos, degradación y absorción de moléculas simples y transformación de polímeros (la temperatura incrementa hasta los 45 ºC).
Fase termófila
En esta fase actúan las bacterias termófilas y termotolerantes. Se produce una degradación importante de los compuestos orgánicos y una elevada evaporación de agua (la temperatura se mantiene entre los 45 ºC y los 75ºC).
Fase de maduración
Tiene lugar una nueva colonización mesófila. La materia orgánica se estabiliza y se humifica. (Descenso de la temperatura hasta valores próximos a condiciones ambientales).

La capacidad de transformación depende básicamente de la composición del material a biotransformar ya que se pueden controlar el resto de los parámetros del proceso.

En la tabla siguiente se aprecia la cantidad global media de deyecciones anuales que se pueden tratar en una biocompostadora estándar, que utiliza la tecnología específica descrita en el presente documento:

Producto
Cantidad anual
Estiércol
1.700 Tn / año
Purines
1.300 m3 / año