La luz más adecuada
Pig International. 36(2):30-32
15-jun-2006 (hace 18 años 5 meses 7 días)Una investigación llevada a cabo en Alemania ha comparado las intensidades
de la luz en cerdas entre el destete y la inseminación. Tal como muestra
la tabla 1, los resultados fueron parecidos para las cerdas mantenidas con luz moderada o intensa, mientras que las que estaban a oscuras tuvieron
los peores resultados. La clasificación en 3 tipos de luz se realizó
a partir de 6 mediciones: encima, debajo, delante, detrás, derecha e
izquierda.
Tabla 1. Resultados del experimento llevado a cabo en Alemania en 2005 sobre el tamaño de camada según la intensidad de la luz.
La intensidad depende de la proximidad a la fuente de luz y de las sombras producidas por las instalaciones. Generalmente se considera que las fuentes de luz deben instalarse sobre la cabeza de las cerdas y evitar que instalaciones como comederos, etc hagan sombra sobre la cara del animal.
Un estudio (Lahrmann y Arndt, 1986), realizado hace 20 años, mostró que menos cerdas volvían al estro cuando el área de inseminación contenía luz artificial. Otro estudio (S Hoy, 1979 y 1981) encontró que las cerdas que habían crecido con 80 lux durante 8 o 14 h/día tenían un mayor grado de madurez de ovarios y útero que las cerdas mantenidas a 50 lux durante 14 h/día. Este autor recomienda 150-300 lux en el área de inseminación durante 14 h/día para incrementar la tasa de concepción y el tamaño de camada. Esta intensidad puede obtenerse instalando un fluorescente de 58 W cada 2-3 plazas en el área de inseminación a 1,5 m sobre las cabezas de las cerdas. Muchos otros autores apuestan por los fluorescentes. Hay que tener en cuenta que un fluorescente de 58 W de 150 cm proporciona más luz que 4 bombillas de 100 W.
Finalmente hay otra serie de consideraciones a tener en cuenta. La limpieza de las fuentes de luz es esencial. Se ha comprobado que la suciedad puede disminuir un 25 % o más la intensidad de una bombilla. Otra medida aconsejable es pintar las paredes de blanco o de un color claro y no utilizar instalaciones de colores oscuros que absorban la luz.
Tabla 1. Resultados del experimento llevado a cabo en Alemania en 2005 sobre el tamaño de camada según la intensidad de la luz.
| Intensidad | Oscuridad (11-26 lux) | Luz moderada (28-43 lux) | Luz intensa (44-89 lux) |
| Nacidos totales | 10,52 | 11,60 | 11,66 |
| Nacidos vivos | 9,04 | 10,26 | 10,20 |
La intensidad depende de la proximidad a la fuente de luz y de las sombras producidas por las instalaciones. Generalmente se considera que las fuentes de luz deben instalarse sobre la cabeza de las cerdas y evitar que instalaciones como comederos, etc hagan sombra sobre la cara del animal.
Un estudio (Lahrmann y Arndt, 1986), realizado hace 20 años, mostró que menos cerdas volvían al estro cuando el área de inseminación contenía luz artificial. Otro estudio (S Hoy, 1979 y 1981) encontró que las cerdas que habían crecido con 80 lux durante 8 o 14 h/día tenían un mayor grado de madurez de ovarios y útero que las cerdas mantenidas a 50 lux durante 14 h/día. Este autor recomienda 150-300 lux en el área de inseminación durante 14 h/día para incrementar la tasa de concepción y el tamaño de camada. Esta intensidad puede obtenerse instalando un fluorescente de 58 W cada 2-3 plazas en el área de inseminación a 1,5 m sobre las cabezas de las cerdas. Muchos otros autores apuestan por los fluorescentes. Hay que tener en cuenta que un fluorescente de 58 W de 150 cm proporciona más luz que 4 bombillas de 100 W.
Finalmente hay otra serie de consideraciones a tener en cuenta. La limpieza de las fuentes de luz es esencial. Se ha comprobado que la suciedad puede disminuir un 25 % o más la intensidad de una bombilla. Otra medida aconsejable es pintar las paredes de blanco o de un color claro y no utilizar instalaciones de colores oscuros que absorban la luz.