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Introducción
Debido a razones históricas relacionadas con la industria farmacéutica, a escándalos en alimentos y piensos, a las crisis sanitarias humanas y animales, y a las percepciones del consumidor, acontecerán cambios radicales en la legislación de la UE referente a los aditivos en los piensos a lo largo de la próxima década. Entre otros cambios seremos testigos de la total prohibición de los promotores de crecimiento antimicrobianos (AGP), así como de una notable reducción en los coccidiostatos admitidos en la UE. Por ello, los productores de lechones están probando productos alternativos a los AGP, tales como los extractos vegetales.
Definición y estatus legal
Los extractos vegetales forman parte de un extenso grupo de "nuevos" promotores de crecimiento que están vagamente clasificados en la UE, en una "zona gris": hierbas, especias, nutracéuticos, aceites esenciales, extractos vegetales y frutales, productos de fermentación "de origen natural", derivados de raíces, plantas, levaduras y microorganismos.
El estatus legal de estos productos es actualmente incierto (de ahí el término productos de la "zona gris". Dichos productos ocupan hoy el mismo área legal que los enzimas y los probióticos de hace 10 años). Los productos de la "zona gris" son extensamente utilizados en el mercado de la UE pero aún no están definitivamente amparados por una legislación sobre aditivos para piensos. Debido a la necesidad de alternativas a los AGP, hay una cierta "tolerancia" legal. Sin embargo, las intenciones de la UE de establecer una Autoridad Europea para la Seguridad Alimentaria (AESA), harán posible que dicha Autoridad introduzca las directrices y procedimientos para la evaluación y aprobación de productos como los previamente mencionados, dentro del marco de la UE.
Acción y condicionantes de uso
Estos nuevos tipos de productos son comercializados activamente en la UE por un extenso número de pequeños proveedores y fabricantes innovadores más que por las multinacionales tradicionales. Resultados preliminares asemejan su eficacia a los AGP que todavía están permitidos, como la avilamicina. Existen numerosas teorías sobre los modos de acción de estos productos, aunque en concreto, en cuanto a extractos vegetales y de frutas se refiere, es aceptado especialmente por los expertos en nutrición humana, el concepto de "alimento completo" para mantener la salud: los extractos naturales de frutas y vegetales contienen miles de componentes (vitaminas, enzimas, coenzimas y otros micronutrientes) que trabajan conjuntamente y producen un efecto sinérgico mucho mayor que las moléculas sintéticas individuales o los extractos purificados.
El principal problema con los productos de esta "zona gris", en mi opinión, es que es difícil para los usuarios valorar su calidad, seguridad y eficacia, sin la garantía de ser un aditivo aprobado por la UE. Por ejemplo, hace 10 años había cientos de probióticos y enzimas para pienso en el mercado de la UE. Hoy en día sólo unos 60 productos enzimáticos para piensos y unos 20 probióticos han sobrevivido al exigente proceso regulador existente.
Por tanto, hasta que la legislación de la UE entre en vigor y los extractos vegetales hayan sido correcta e independientemente evaluados por los reguladores y sus expertos, los nutricionistas tendrán que seleccionarlos y aplicarlos con mucho cuidado. El producto más barato, dentro de los extractos, no tiene por qué ser el más interesante en relación a su precio-eficacia. Los fabricantes de pienso y los productores de porcino, previo a su uso, deberían reflexionar sobre:
- Seguridad, por ejemplo, la presencia de toxinas, dioxinas y otras sustancias indeseables.
- Calidad, especialmente la variación entre las partidas y la estabilidad durante el proceso de fabricación.
- Eficacia. ¿Cuál es la dosis óptima que ofrece consistencia, coste eficaz, mejora en el crecimiento, eficiencia de conversión del pienso y otros parámetros productivos?.
Por estas razones es importante seleccionar un proveedor acreditado y constituir una relación de confianza, quizá colaborando en las pruebas de desarrollo de productos. Más tarde, cuando la AESA haya inicializado el proceso de regulación de los productos de dicha "zona gris", sería prudente comprar extractos vegetales que pueden mantener el estatus de aprobación dentro del marco de la UE.
