La gripe porcina es una infección viral respiratoria muy contagiosa que se ha convertido en enzoótica en áreas con una densidad porcina elevada. Puede tener un impacto económico significativo en las explotaciones afectadas y puede representar una amenaza para la población humana, ya que los virus de la influenza porcina (SIV) son patógenos zoonóticos. Seguir profundizando en el conocimiento de las cepas del SIV es indispensable para la prevención y el control de la enfermedad en los cerdos y para ayudar en la evaluación del riesgo de transmisión entre especies, para prevenir posibles pandemias.
Los SIV pertenecen al género Influenzavirus A, de la família Orthomyxoviridae. Su genoma consiste en ocho únicos segmentos de RNA de cadena única de polaridad negativa. Se subtipifican según sus principales determinantes antigénicos, las glipocproteínas de superficie hemaglutinina (HA) y neuraminidasa (NA). La aparición de un nuevo SIV puede producirse mediante la transmisión del virus desde otra especies, cambios antigénicos en los antígenos virales principales mediante mutaciones (deriva o drift), o recombinación genética (intercambio de genes entre dos o más virus). El cambio antigénico se produce cuando los genes HA y NA se intercambian durante la recombinación.
Actualmente, en el mundo circulan virus de tres subtipos distintos (H1N1, H3N2, H1N2) entre la población porcina pero su origen es distinto dependiendo del área y, en un mismo subtipo, pueden existir distintos linajes genéticos.
En Europa, todos los SIVs predominantes H1N1 son de origen aviar, introducidos a partir de aves acuáticas en 1979 por lo que se las conoce como "H1N1 porcino tipo aviar" (H1avN1). Poco después de la pandemia de Hong-Kong de 1968 se introdujo un virus influenza H3N2 en cerdos europeos, pero sólo se extendió tras recombinarse con el virus H1avN1, adquiriendo 6 genes internos de este último. Este “H3N2 porcino recombinante tipo humano” (H3N2) se ha convertido en el genotipo de virus H3N2 dominante en cerdos europeos.
En 1994 el H3N2 adquirió el gen HA de un virus H1N1 humano de los 1980s, produciendo el ahora predominante "H1N2 porcino recombinante tipo humano" (H1huN2). Estos tres SIVs han circulado simultáneamente durante muchos años y, desde el año 2000, se han detectado nuevos virus fruto de recombinaciones entre estos virus enzoóticos (o entre SIVs y virus estacionales humanos). Se produjo deriva antigénica mediante la aparición de una segunda generación de recombinantes como rH1avN2 y rH1huN1, pero estos aislados solían ser esporádicos y sólo uno, el rH1avN2, suplantó el H1huN2. Pese a las recombinaciones, la evolución viral mediante deriva antigénica ha sido limitada en los cerdos europeos en los últimos años, en todos los subtipos. De este modo, la situación fue bastante estable en la cabaña porcina europea hasta la aparición del virus pandémico H1N1 (H1N1pdm) de origen porcino.
Virus de la gripe porcina detectados en cerdos europeos en 2014
H1N1pdm se generó a partir de una recombinación entre un SIV triple recombinante americano (que mostraba una HA “clásica” y genes de origen porcino, humano y aviar) y un virus H1avN1 a partir del cual el primero adquirió los genes NA y matriz (M). Los cerdos fueron muy susceptibles a este virus humano de origen porcino y se describieron numerosos casos de esta zooantroponosis en todo el mundo al cabo de muy poco tiempo de aparecer en humanos. La adaptación al cerdo y la diseminación continuada del virus en la población porcina se demostró en la mayoría de los principales países productores de cerdos, incluyendo Europa. Al cabo de poco tiempo de la transmisión entre especies, se detectaron varias recombinaciones entre antiguos SIVs enzoóticos y H1N1pdm. Estos nuevos “virus recombinantes tipo H1N1pdm” consistían, por ejemplo, en virus H1N1pdm que habían adquirido un gen N1 o N2 de SIVs europeos, o virus H1huN2 que habían adquirido genes internos de H1N1pdm.
De este modo, entre los cerdos europeos circulan cuatro linajes víricos, que tienen HA claramente distinguibles y que pueden ser considerados virus enzoóticos, aunque su presencia relativa y nivel de incidencia pueda variar entre países. El linaje dominante sigue siendo el antiguo H1avN1, seguido por el H1huN2, el H1N1pdm y el H3N2. El subtipo H3N2 ha desaparecido de algunas áreas geográficas mientras que sigue siendo prevalente en otras. Curiosamente, las áreas que se han mantenido libres de H3N2 durante años son las que ahora muestran las frecuencias más elevadas de virus H1N2 (H1huN2 o rH1avN2). Los H1N2 recombinantes que contienen genes del virus H1N1pdm se han detectado cada vez con más frecuencia durante los dos últimos años, indicando que algunos de ellos también podrían haberse establecido en granjas porcinas. Esto ilustra la creciente diversidad y complejidad genética de los SIVs europeos y sus potenciales implicaciones para las infecciones zoonóticas.
Es muy recomendable continuar con la vigilancia y con la mejora del conocimiento sobre los virus, con la colaboración de los ganaderos, veterinarios, científicos, autoridades y partes interesadas.