Control térmico de lechones en maternidad (III)

Es fácil observar la reacción de las cerdas (¡de todas!) ante el suministro de papel, basta un puñado enfrente del hocico o al alcance de la boca y ya está... ¡oxitocina! ¡Es como aplicar una inyección!

Este consejo muestra el beneficio de los nidos cerrados y la importancia de regular la temperatura según la edad de los lechones.

En este consejo se mostrará el funcionamiento de las placas calefactoras.

La mayoría de mamíferos recién nacidos son muy sensibles a las bajas temperaturas. Sin embargo, los lechones están especialmente predispuestos a entrar en una situación de pérdida de energía.