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Detectar correctamente el celo es determinante para el éxito reproductivo de las granjas y es el primer paso para conseguir fertilidad y prolificidad en las cerdas.
Se considera celo al período durante el cual ocurre la ovulación y la cerda acepta ser montada por el macho o se encuentra receptiva para ser inseminada, suele durar un promedio de 2 a 3 días dependiendo de múltiples factores, por lo tanto, es posible lograr la gestación si se inseminan o cubren adecuadamente.
Una cerda en celo muestra diferentes signos, entre los principales podemos mencionar: inapetencia, inquietud, vulva edematizada, gruñido de macho y reflejo de quietud.
Todos estos signos podemos verlos en la siguiente cápsula:
