Objetivo
Mejorar el uso del material de enriquecimiento "marginal".
Descripción
Aunque las cadenas de acero se consideren un material de enriquecimiento "marginal", los cerdos se sienten atraídos por ellas: su movilidad, su forma anatómica para la boca de los cerdos y su ruido, los estimulan.
Este truco muestra cómo potenciar el atractivo de las cadenas. La idea es originaria de los Países Bajos. Veamos de qué se trata: a una cadena simple le añadimos otras cadenas para ramificarla. Como sucede en otros casos, el secreto es que puedan jugar juntos (los cerdos son animales sociales y prefieren formar parte de un grupo, comer juntos, moverse juntos, etc). Añadiendo una cuerda o un trozo de madera blanda al extremos de la cadena se pueden mejorar un poco más las características de este material, haciéndolo masticable.
Cerdos que juegan juntos en diferentes etapas de la cría.
Algunos puntos a tener en cuenta:
- Longitud correcta: podemos dejar que toque al suelo, favoreciendo la simulación del comportamiento de hozar.
- Diámetro correcto de los eslabones: es inútil proporcionar una cadena demasiado gruesa a un lechón muy pequeño. Debe caber "confortablemente" en la boca, sin requerir demasiado esfuerzo para masticarla. Se recomienda un diámetro de 4-5 mm para los lechones destetados, 7 mm para crecimiento y 8 mm para engorde y cerdas.
- La distancia entre ramificaciones debe ser de unos 10-15 cm, de modo que las alturas de manipulación sean todas similares (normalmente tenemos animales de peso uniforme en cada corral) para que los cerdos estén al mismo nivel al jugar.
- El final de cada cadena debe quedar aproximadamente a la altura del hocico de los cerdos del corral.
- Para conseguir un efecto mayor hay que mantener una proporción entre el número de cadenas con el de cerdos.
- Es posible crear ramificaciones con materiales mixtos (palas, madera, etc), lo importante es que jueguen con ellas.
En la siguiente tabla se muestra un estudio que comparó diferentes materiales de enriquecimiento.