La ingesta de energía aumentó de forma lineal según el nivel de energía digestible de la dieta. El nivel de energía no afectó ni sobre la movilización de la reserva corporal, ni sobre los parámetros reproductivos o los niveles de insulina en suero mientras que sí se observó un aumento lineal del peso de los lechones en función del consumo de energía de las cerdas. Según los resultados las cerdas primíparas en lactación tienen unas necesidades de energía de 3.800 kcal/kg pienso lo que corresponde a una ingesta de como mínimo 14.307 kcal/d.
Paiva, F.P., Donzele, J.L., Oliveira, R.F.M. et al. Digestible energy in the diet of primiparous lactating sows. Arq. Bras. Med. Vet. Zootec. 2006. Vol. 58 (2): 234-241.