Para el presente estudio se utilizaron un total de 288 machos castrados cruzados con un peso inicial de 21,4 kg. La unidad experimental fue el corral de 4 animales, con 12 réplicas por tratamiento experimental. Se utilizó un programa de alimentación de tres fases siendo el peso vivo aplicable para cada fase de: 25 a 40 kg (fase 1), 40 a 80 kg (fase 2) y 80 a 120 kg (fase final). Los tratamientos experimentales fueron preparados por substitución individual de los 6 híbridos de maíz en la dieta. Todas las dietas se ofrecieron ad libitum y en harina. Los animales se pesaron individualmente cada 2 semanas y en el momento del sacrificio para calcular la ganancia media diaria (GMD), el consumo medio diario (CMD) y el índice de conversión (IC). Una semana antes del sacrificio se evaluó individualmente la grasa intramuscular y la sección del lomo (longissimus dorsi) y el espesor de grasa dorsal a nivel de la 10ª costilla mediante ultrasonidos.
La densidad del grano se correlacionó con el contenido de grasa intramuscular del longissimus dorsi. El tiempo de molienda se correlacionó con la GMD durante la primera fase, con el CMD durante la segunda fase y con el peso vivo al final de la segunda fase. El contenido en fibra neutrodetergente de los granos de maíz se correlacionó con la GMD durante la fase de acabado y con el peso vivo final así como con el CMD durante la fase de crecimiento y la grasa intramuscular.
Se puede concluir que ninguna de las correlaciones obtenidas es suficientemente potente para permitir seleccionar los híbridos de maíz en función de determinadas propiedades físicas o químicas del grano destinado a ser utilizado en dietas porcinas.
SM Moore, KJ Stalder, DC Beitz, CH Stahl, WA Fithian and K Bregendahl, 2008, Journal of Animal Science, 86:592-601.