X
XLinkedinWhatsAppTelegramTelegram
0
Lee este artículo en:

Importancia de una ingestión elevada durante la lactación de cerdas primíparas

El tamaño de camada puede condicionar la ingestión y movilización de reservas, el intervalo destete cubrición e incluso el tamaño de camada del siguiente ciclo.
15 mayo 2003
X
XLinkedinWhatsAppTelegramTelegram
0
En los últimos años se ha incrementado de forma sustancial el tamaño de camada, principalmente en el primer parto (en el 2002 se estimó una mejora anual de 0,045 lechones/parto). Este incremento conlleva unas necesidades superiores a los requerimientos habitualmente estimados.

El objetivo de este experimento fué determinar los posibles efectos negativos sobre la lactación y sobre el rendimiento post-destete de las primíparas con grandes tamaños de camada. Además se pretende ver hasta qué punto un aumento en la ingestión de pienso durante la lactación puede prevenir estos efectos negativos. Se utilizaron 268 cerdas primíparas de 3 líneas genéticas distintas (G1, G2, y G3) y con tamaños de camada estandardizados a 8, 11 ó 14 lechones durante 4 semanas de lactación.
Se tomaron datos productivos y reproductivos considerando que un IDC superior a 7 días era “largo”.

Los resultados mostraron como las cerdas G3 eran más pesadas y magras en el momento del destete y sus camadas tenían un crecimiento más rápido en comparación con las cerdas G1 y G2 (p<0,05). También se observaron cambios en la ingestión de pienso y el intervalo destete-cubrición (P<0,05) entre G3 y G1. La ingestión de pienso diaria sólo se vio afectada por el tamaño de camada en las cerdas G2 (cuadráticamente, P<0,05), con un máximo en 10,8 lechones. Se estimó que por cada lechón extra, la probabilidad de tener un intervalo destete-cubrición más largo aumenta un 23% (P<0,01). Por otro lado, por cada kg/d de pienso se estimó una reducción del 42% de probabilidad de tener un IDC más largo. También se relacionó la pérdida de peso corporal en el primer ciclo con el tamaño de camada en el ciclo siguiente (p<0,01)

Estos resultados parecen demostrar la necesidad de incluir la capacidad de ingestión de pienso dentro de los criterios de selección genética.

J. J. Eissen, E. J. Apeldoorn, E. Kanis, M. W. A. Verstegen y K. H. de Greef. Journal of Animal Science 2003. 81:594-603

Comentarios del artículo

Este espacio no está orientado a ser una zona de consultas a los autores de los artículos sino que pretende ser un lugar de discusión abierto a todos los usuarios de 3tres3
Publica un nuevo comentario

Para comentar debes registrarte en 3tres3 y acceder como usuario.

No estás suscrito a la lista Noticias del sector porcino

Boletín de noticias sobre el mundo del porcino

Accede y apúntate a la lista

No estás suscrito a la lista La web en 3 minutos

Un resumen semanal de las novedades de 3tres3 Latam

Accede y apúntate a la lista