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El almidón resistente (AR) habitualmente es definido como la cantidad de almidón y de productos de degradación del almidón que no es absorbida en el intestino delgado de individuos sanos. La proporción de almidón de la ración que escapa de la digestión enzimática depende en gran medida del tipo de almidón. La fermentación del AR es difícil de cuantificar, y todas las metodologías utilizadas padecen sus propias limitaciones. El objetivo de este estudio fue determinar el destino del carbono procedente del AR en comparación con la digestión enzimática del almidón en cerdos alojados en grupo, y utilizar estos datos para mejorar la estimación del valor energético del AR. El estudio se centró en la cuantificación in vivo de la fermentación del almidón utilizando una técnica no invasiva y en las posteriores mediciones de la cinética de utilización del almidón y del balance energético mediante calorimetría indirecta. Para este propósito, 10 grupos de 14 cerdos fueron asignados a uno de los dos tratamientos dietéticos, constituidos por un 45% de almidón de maíz pregelatinizado (P) o retrógrado (R). En ambas raciones se estableció la diferencia entre el almidón y los componentes de la dieta sin almidón, gracias al enriquecimiento natural con 13C, con el objetivo de poder diferenciar la digestión enzimática de la fermentación del almidón de maíz. La retención energética y proteica se midió mediante el uso de calorimetría indirecta después de adaptar a los cerdos a las raciones durante 3 semanas.
El enriquecimiento fecal de 13C fue mayor en los cerdos alimentados con la ración R (P < 0,001), ya que un 43% del almidón R resistió la digestión enzimática. La energía retenida en forma de proteína no se vio afectada, mientras que la energía retenida en forma de grasa fue un 29% inferior que la de los cerdos alimentados con la ración P (P < 0,01). El consumo de energía digestible, el consumo de energía metabolizable, y la retención energética se redujeron (P < 0,05) en los cerdos alimentados con la ración R en comparación con los alimentados con la ración P, con una diferencia de 92, 54, y 33 kJ/(kg0.75 × día), respectivamente. Por lo tanto, los valores energéticos del AR fermentado fueron un 53, 73 y 83% de la energía digestible, metabolizable y neta del almidón enzimáticamente degradable, respectivamente.
Gracias al enriquecimiento natural con 13C, la diferencia establecida entre el almidón y los componentes de la dieta sin almidón, puede llegar a convertirse en un prometedor método in vivo y no invasivo para estimar la proporción del almidón de la ración que es fermentado a nivel del tracto gastrointestinal.
WJJ Gerrits, MW Bosch and JJGC van den Borne. Quantifying resistant starch using novel, in vivo methodology and the energetic utilization of fermented starch in pigs. 2012. The Journal of Nutrition, 142: 238-244.