Durante el estudio se utilizó un modelo padre-madre para estimar los efectos genéticos directos (camadas) y maternales (cerda). La heredabilidad directa para la duración de la gestación fue de 0,3 mientras que la heredabilidad maternal se estimó en 0,2 para los datos procedentes de los núcleos y en 0,3 para los datos procedentes de la explotación experimental. La correlación genética maternal entre la duración de la gestación y el tamaño de la camada fue negativa mientras que las correlaciones genéticas entre la duración de gestación y el número de nacidos muertos no fue coherente entre los dos conjuntos de datos. Las correlaciones genéticas entre la longitud de la gestación y el número de lechones muertos tras el parto fueron negativas. Finalmente, las correlaciones genéticas entre la duración de la gestación y el peso medio al nacimiento fueron positivas.
L. Rydhmer, N. Lundeheim, L. Canario. Genetic correlations between gestation length, piglet survival and early growth. Livestock Science. 2008. Vol. 115 (2-3): 287-293.