Abstracts - Nutrición

Con independencia del tipo de dieta las cerdas alimentadas “ad libitum” aumentaron su peso vivo y mantuvieron los rendimientos productivos pero se encareció el coste de alimentación.

La administración del pienso granulado o en amasijo mejoró el rendimiento productivo de los lechones aunque su efecto no fue aditivo.

La mejora en la cantidad de tejido magro y la reducción del tejido graso en la canal fue proporcional al tiempo de administración del ácido linoléico conjugado.

Durante las dos semanas siguientes al destete, el calostro bovino ofreció resultados productivos equivalentes a los obtenidos con el plasma desecado.

Cuando no se incorporan otros aminoácidos sintéticos, el máximo aporte de lisina para sustituir a la harina de soja es de 0,15%.

Se confirma que los lípidos (aceite de soja) ofrecen menos garantías que el almidón como recurso energético para cerdas en lactación.

La suplementación con lisina como único aminoácido sintético no permite reducciones importantes del contenido en proteína bruta de dietas con soja sin perjudicar los rendimientos productivos.

Según este estudio las dietas ricas en fibra no reducen la motivación alimentaria de las cerdas gestantes con alimentación restringida.

Los resultados no muestran que el mecanismo regulador de la ingestión voluntaria por la GLP-1 sea la fermentación de la fibra en el intestino posterior.

Los resultados indican que el aprovechamiento digestivo de los alimentos fibrosos aumenta significativamente con la edad del cerdo.

Se utiliza un modelo “in vitro” que permite realizar un screening de principios activos antes de ensayar “in vivo”.

Los resultados sugieren que una dosis moderada de xilanasas puede mejorar los rendimientos productivos obtenidos con dietas de trigo.

La sustitución de guisante por veza no deterioró significativamente los rendimientos productivos de los cerdos en crecimiento.

Los resultados sugieren que un sistema de “choice feeding” mejora el rendimientos de los lechones alojados en grupos grandes.

El perfil de ácidos grasos poliinsaturados del magro y del tejido graso se modifica fácilmente a través de la dieta.

Se comprueba que sobrealimentar las hembras gestantes durante el segundo mes de gestación ejerce un efecto positivo sobre el rendimiento productivo de la progenie.

La suplementación de la dieta con vitamina C aumentó el número de dosis obtenidas por eyaculado.

La incorporación de boniato crudo a la dieta empeoró los rendimientos productivos de los lechones.

La inmunocastración no afectó los rendimientos productivos al comparar con cerdos castrados quirúrgicamente.

Los resultados sugieren que las hembras estimulan más la producción de leche de la madre que los machos.

La excreción endógena ileal de proteína aumenta en términos absolutos y se reduce en términos relativos al aumentar el consumo de materia seca.

La suplementación post destete con leche entera o en polvo mejoró los resultados productivos durante las primeras semanas.

Los rendimientos productivos se vieron afectados por la disponibilidad de espacio de comedero pero fueron independientes del tamaño del grupo.

La incorporación de lipasas redujo la carga microbiana total de la parte proximal del tracto gastrointestinal.